Artículo publicado en Rojo y Negro nº 389 mayo.

En la planta que Motherson tiene en Medina de Rioseco y que cuenta con cerca de 400 trabajadores y trabajadoras, la representación legal de las personas trabajadoras convocó una huelga indefinida a partir del domingo día 14 de mayo a las 22:00h debido al incumplimiento por parte de la empresa de la cláusula de revisión salarial del Convenio de Químicas y por el incumplimiento del pacto de empresa referente al plus convenio para las nuevas incorporaciones.

La plataforma firmada para los años 2018, 2019 y 2020 fue denunciada por la empresa quedando solamente sus mejoras sociales. Las mejoras económicas quedaron caducadas a partir de la fecha de vencimiento: artículo VII referente al plus convenio del 15% para las nuevas incorporaciones, un artículo que la empresa ha seguido aplicando a pesar de estar caducado. El hecho de que exista esta cláusula es abusivo y discriminatorio ya que se perpetua una doble escala salarial entre la plantilla, ya sea por empresa o por ETT, además de dar vía libre a la empresa para realizar contratos precarios a través de las empresas de trabajo temporal y es que el Artículo 29.3 del Convenio General de Químicas deja claro que las personas trabajadoras contratadas por ETT percibirán las mismas retribuciones que las personas trabajadoras de la empresa matriz, así que aquí no había posibilidad de negociación alguna ya que, desde la última reforma laboral, no se puede negociar por debajo de Convenio.
A partir de este momento, desde CGT tomamos varias medidas como informar por escrito a la empresa comunicando esta irregularidad, de la que hicieron caso omiso, recurrir a la Inspección de Trabajo consiguiendo así una resolución favorable o solicitar una mediación en el Servicio de Mediación Laboral de Castilla y León (SERLA), saliendo de esta sin acuerdo.
Por otro lado, tras ser conocedores de la mala aplicación por parte de la empresa del Artículo 38 del Convenio General de la Industria Química sobre la revisión salarial con respecto al IPC y aplicar un 8,8% en lugar del 10,3% (porcentaje que sale de restar al 15,3% de IPC acumulado las subidas salariales, 5%, de los últimos tres años), tomamos la decisión de solicitar a la autoridad laboral competente un SERLA con convocatoria de huelga.
En dicho SERLA la empresa mantuvo su postura y se volvió a salir sin acuerdo, aunque la empresa nos convocó a una reunión para el lunes siguiente a las 11 de la mañana.
Ese mismo sábado, se celebró la asamblea de trabajadoras para explicar la situación y pasar a votar la convocatoria de huelga. La votación salió a favor a pesar del trabajo en contra que había venido haciendo la sección sindical de CCOO.
Comenzó la huelga el primer turno de noche del domingo con una participación en los piquetes espectacular, acudiendo incluso las trabajadoras de ETT que se sumaron a la lucha. En el siguiente turno de mañana nos encontramos con el mismo panorama, que te carga las pilas para seguir peleando, y cuando llegaron las 11, hora de la reunión, entramos decididos a no retroceder ni un solo paso. La empresa, con la chulería ya de lado y con carita de cordero degollado, accedió sin pestañear a aplicar los dos puntos que solicitábamos más uno que no se esperaban: asumir la pérdida económica de las trabajadoras que habían secundado la huelga y el compromiso de no tomar ningún tipo de represalia en contra de ellas.
La solidaridad y el apoyo mutuo no es solo una frase que repitamos hasta la saciedad, son unos valores que caracterizan a esta organización y que, llevándolos a cabo, es como realmente se consiguen las cosas.
Esperamos que estas líneas sirvan de ejemplo para otras muchas compañeras que están en situaciones similares y sigan luchando por la dignidad de todas.

Sección Sindical CGT Motherson

 


Fuente: Rojo y Negro