Los trabajadores de la fábrica de papel de Motril (Granada) se concentraron el lunes 6 de marzo para protestar por el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que les afecta desde enero y que califican de “abusivo” y “desproporcionado”. El ERTE, que tiene una duración prevista para todo el año 2023, implica que los 295 empleados del centro granadino tengan que estar 150 días sin trabajar, con una reducción salarial correspondiente.

Según el comité de empresa, el ERTE está basado en causas organizativas y productivas, debido a una supuesta caída de los pedidos. Sin embargo, desde CGT se denuncia que la empresa no les ha facilitado un calendario de afectación ni les ha ofrecido ningún complemento para paliar la pérdida de ingresos. Además, CGT asegura que la fábrica es rentable y tiene una amplia cartera de clientes tanto nacionales como internacionales.

La plantilla también teme por el futuro del centro de trabajo, que lleva más de 50 años en funcionamiento y que está especializado en la producción de papel adhesivo y resistente al agua. Los trabajadores advierten que los paros provocados por el ERTE están retrasando la entrega y expedición de los pedidos y ponen en riesgo la competitividad y viabilidad del centro.

El ERTE no solo afecta a los empleados directos de Torraspapel, sino también a las empresas auxiliares y proveedoras que dependen de su actividad. Por ello, los trabajadores han contado con el apoyo de otros colectivos sindicales y sociales durante la concentración.

Los representantes del comité han anunciado que han presentado una demanda ante la Jurisdicción Social de Madrid para impugnar el ERTE y han exigido a la dirección de la empresa que retire las medidas o las negocie con garantías. Asimismo, han anunciado nuevas movilizaciones si no se alcanza un acuerdo satisfactorio.

Torraspapel es una filial del grupo Lecta Distribution Group, con sede en Londres (Reino Unido), que cuenta con otras cuatro fábricas en España como son Zaragoza, Leitza (Navarra), Sant Joan Les Fonts (Girona) y Almazán (Soria), donde también se ha aplicado el mismo ERTE

Francisco M. Ortega Palomares


Fuente: Francisco M. Ortega Palomares