La Coordinadora contra Garoña convoca este próximo domingo 2 de Octubre a la próxima Marcha contra Garoña que partirá a las 12 del mediodía desde la localidad burgalesa de Barcina del Barco.
Un año más tenemos que manifestar nuestro rechazo a esta vieja y peligrosa central nuclear, y exigir al presidente Zapatero que cumpla su palabra y aborde sin demora un programa de abandono de la energía nuclear empezando por la más vieja y peligrosa de las centrales nucleares españolas.
La central nuclear de Santa María de Garoña fue conectada a la red eléctrica en la dictadura franquista (2 de marzo de 1971) con una vida estimada de 25 años. Durante estos 34 años su funcionamiento ha estado plagado de averías y problemas. El 5 de julio de 1999 el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo previó informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) renovó la autorización de explotación por un periodo de 10 años, por lo que este permiso expiraría en julio de 2009. La empresa propietaria Nuclenor (50% Endesa y 50% Iberdrola), ajena a los graves problemas que esta planta atómica presenta, ajena al riesgo que esto supone para la población y el medio ambiente, y ajena también a la voluntad de la sociedad, prepara una nueva petición de prórroga para el próximo año.
La central nuclear de Garoña es peligrosa
Garoña esta aquejada de severos problemas de corrosión que afectan a elementos claves para la seguridad como el barrilete y los manguitos de las penetraciones. En 1981 se detectaron graves averías debido al deterioro de estos elementos esenciales del reactor, donde se producen las reacciones nucleares. Estos elementos se han reparado con parches, pero en inspecciones posteriores se ha comprobado que su deterioro sigue progresando de forma preocupante.
El barrilete es una pieza fundamental que se encarga de dirigir el flujo de refrigerante y hace de soporte estructural de los elementos del núcleo, asegurando que su geometría permanezca invariable. Si las fisuras del barrilete avanzan pondrían en peligro su integridad estructural, con el consiguiente peligro de ruptura. Las fisuras halladas tienen una longitud total de 10 metros y las más graves son pasantes. La reparación propuesta por Nuclenor ha consistido en soldar unas barras y cinchas que abrazan el barrilete, mientras el proceso de corrosión prosigue. Por otro lado, los manguitos de las penetraciones son unos tubos que entran en la vasija del reactor con el fin de guiar a las barras de control para controlar y poder detener la reacción nuclear. De las 97 barras de control, se han detectado agrietamientos en 66 penetraciones. Estos agrietamientos son progresivos, comenzando por la detección del primero en 1982 y habiendo detectado 55 en 2001. Se han seguido produciéndose en 2003, lo que demuestra que su deterioro progresivo es imparable. Los sucesivos informes del CSN muestran que este fenómeno está fuera de control y que avanza más deprisa de lo esperado, de tal forma que han aparecido fisuras en zonas donde no se contaba con ello.
Ecologistas en Acción (EeA) ha elaborado un informe sobre el Estado de la central nuclear de Garoña que muestra los principales problemas de seguridad de la central nuclear de Garoña. Las conclusiones principales del informe son que la central está aquejada de graves problemas de seguridad entre los que destaca la corrosión.
Durante su funcionamiento Garoña produce residuos radioactivos de alta actividad (combustible de uranio quemado) que son acumulados en su piscina interior (291 toneladas de uranio sin contar la última parada de recarga de marzo), sin saber qué hacer con ellos al no existir ningún tratamiento para anular su peligrosidad. También en funcionamiento habitual se producen fugas de gases y líquidos. El 17 de Diciembre del 2003 el Congreso de Diputados exigió la realización de un “estudio epidemiológico” en los pueblos del entorno de las centrales nucleares, que a fecha de hoy sigue sin realizarse.
La central nuclear de Garoña es innecesaria
Durante el año 2004 (el mejor año de producción de Garoña en toda su historia) la central nuclear produjo casi 4.050 Gwh, lo que supone un 1,45% del total de energía eléctrica producida en España en este pasado año. Los 9 reactores nucleares que hay en el estado produjeron casi 63.675 Gwh, lo que supone un 23% del total.
El consumo eléctrico se ha disparado de manera espectacular en los últimos años. Desde 1997 (cuando se dieron los primeros pasos en el proceso de transición a la competencia), el consumo eléctrico ha crecido en nuestro país en un 47%. Este incremento del consumo es el 64,6% en la última década (1994-2004), el 171,4% en los últimos 25 años (1979-2004), el 962%, con respecto a hace 40 años (1964-2004) y el 1.670%, durante los últimos 45 años (1959-2004). Este continuo incremento es debido en parte al crecimiento económico experimentado, pero también a causa de los bajos precios de la electricidad y a la gran ineficiencia de nuestro sistema eléctrico.
EaA ha elaborado un Plan de ahorro y eficiencia en el consumo eléctrico en el que se recogen medidas concretas a llevar a cabo que supondrían una reducción del actual consumo eléctrico del 35% en un periodo de diez años. Una parte de las medidas van encaminadas al fomento de tecnologías más eficientes en la industria, en los hogares (utilización de lámparas de bajo consumo, eliminación de los pilotos en modo de espera, retirada del mercado de los aparatos menos eficientes), la introducción en la construcción de viviendas de pautas que contribuyan a la reducción del consumo (arquitectura bioclimática), cambios en el alumbrado público, reducción de pérdidas en redes de transporte y distribución, etc., y otras van dirigidas a incrementar el precio de la electricidad. Con la adopción de las medidas propuestas podría conseguirse una reducción del consumo eléctrico de al menos un 35 % en un periodo de diez años.
EeA ha elaborado también una Propuesta de desarrollo de energía eólica en donde se propone superar los 20 Mw de potencia eólica en un periodo de siete años. Con la instalación de los 21.547 Mw eólicos propuestos para el horizonte 2.012, obtendríamos una producción anual de 45.248,7 GWh, lo que constituye el 18,9% del consumo total de electricidad alcanzado en el año 2004, y el 70% de lo que este pasado año han producido los 9 reactores nucleares en el estado.
Si tenemos en cuenta las cifras de producción eléctrica del pasado año, y los objetivos de las dos propuestas anteriormente comentadas (ahorro del 35% en el consumo eléctrico y producción del 18,9% mediante la energía eólica), se podría perfectamente prescindir de todas las centrales nucleares y a la vez cumplir con el Protocolo de Kyoto. La Coordinadora contra Garoña ve apremiante un cambio en el modelo energético basado en el ahorro y en la eficiencia energética, y en la producción mediante las energías renovables como la eólica y la solar. Es constatable que en la actualidad hay herramientas para abordar una gran reducción en el consumo de energía eléctrica y también hay herramientas para la producción de electricidad con métodos limpios, siendo las principales razones para no abordar este cambio la falta de voluntad política y las inercias de las grandes empresas eléctricas que en la actualidad se benefician de esta insostenible situación. Para afrontar este cambio es necesario y urgente el cierre de las centrales nucleares, empezando por la única de primera generación que quedará activa a partir de abril de 2006.
Por todo ello exigimos la paralización inmediata y definitiva de la actividad de la central nuclear de Garoña y su posterior desmantelamiento. Convocamos a la sociedad a la manifestación que se celebrará este próximo domingo 2 de Octubre en la localidad burgalesa de Barcina del Barco para finalizar en las puertas de esta vetusta e insegura central nuclear.
Burgos, 16 de septiembre de 2005
Fuente: CGT BILBAO
