Artículo publicado en Rojo y Negro nº 394, noviembre 2024

Ha pasado más de un año desde el 18 de mayo de 2023, una fecha en la que CGT convocó una huelga general del sector de Transporte por Carretera y de las presiones de más y más concentraciones.

De repente, una mañana, nos encontramos con una rueda de prensa convocada por los sindicatos mayoritarios de este país en la que comunican que van a convocar una huelga por la jubilación anticipada a los 60 años de los y las conductoras profesionales de forma unilateral y sin contar con ninguna otra fuerza sindical ni ninguna otra asociación o plataforma del sector, para los días 28 de octubre, 11, 28 y 29 de noviembre y 5, 9 y 23 de diciembre de 2024 y que podría ser indefinida a partir de entonces si no se atienden sus reivindicaciones. ¡Pues nada! ¡oye! ¡que de repente se han acordado de que pueden solicitar que se aplique a todas las personas trabajadoras de este sector los coeficientes reductores amparándose en el Real Decreto 1698/2011 (por el que se regula el régimen jurídico y el procedimiento general para establecer coeficientes reductores y anticipar la edad de jubilación en el sistema de la Seguridad Social).
Es cierto que convocan varios días de paros totales de 24 horas e, incluso, amenazan con hacerla indefinida a final de año de no atender a la reivindicación, el primer día será 28 de octubre. Pero, analizando el documento presentado en el Servicio de Mediación y Arbitraje (SIMA), nos encontramos con que la huelga se la convocan a la patronal para pedirles y/o exigirles que vayan de la mano como buenos hermanos a pedir a papá Estado que, por favor, nos apliquen el Real Decreto. Estos sindicatos están a un mundo de nuestra reivindicación que fue directamente al Estado y al Ministerio de la Seguridad Social que son quienes tienen que aplicarlo. Nuestro procedimiento sigue su curso jurídico, dicho sea de paso, y llegaremos hasta el final.
Y de nuevo se comete la traición a la clase trabajadora dividiendo el sector pese a realizar la misma función, estar a los mandos de un vehículo pesado. Han llegado a un irrisorio acuerdo con la patronal y desconvocan la huelga de mercancías, pero, por el contrario, la de transporte de viajeros sigue su curso y la huelga sigue en pie. ¿Bajo los mismos parámetros? ¿Exigiendo una edad máxima de jubilación? ¡No! Para reivindicar lo que desea la patronal. Esta convocatoria huele mal, muy mal, y la partición del sector entre mercancías y viajeros es un atraso porque si fuéramos unidas seríamos más fuertes. Seguimos en manos de quien nos vende por tres de pipas y una de dos, o abrimos los ojos o verde las han segado.
Como somos CGT y no eludimos una batalla que pueda mejorar la vida de las personas trabajadoras, nosotras vamos a parar seguro el día 28 de octubre. ¡A ver dónde acaba esto!

Raúl Martínez Alcalá
Secretario general SFTC


Fuente: Rojo y Negro