Una vez pasado el día internacional de la mujer trabajadora, el PP ha dejado de hacer declaraciones referentes a la modificación de la ley del aborto. A mi, personalmente, esto si que me parece violencia estructural.
Nos han estado amenazando durante la campaña del 8 de marzo con el tema, el ministro de Justicia, Gallardón, por un lado, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Aguirre, por otro, toda la corte de ministras y ministros por detrás…. ¿No es esto violencia contra las mujeres? Anunciaron esta reforma para el otoño de este año. A día de hoy, no han vuelto a hacer declaraciones. ¿Lo harán o no lo harán? He ahí el misterio.
Nos han estado amenazando durante la campaña del 8 de marzo con el tema, el ministro de Justicia, Gallardón, por un lado, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Aguirre, por otro, toda la corte de ministras y ministros por detrás…. ¿No es esto violencia contra las mujeres? Anunciaron esta reforma para el otoño de este año. A día de hoy, no han vuelto a hacer declaraciones. ¿Lo harán o no lo harán? He ahí el misterio.
El presidente de Acai (asociacion de clínicas acreditadas para la interrupción del embarazo), le recuerda al ministro Gallardón que son las leyes penalistas y restrictivas las que obligan a las mujeres a abortar en condiciones inseguras y clandestinas. Que las únicas medidas que frenan los embarazos no deseados son: educación sexual, acceso a medios contraceptivos y estrategias preventivas en los grupos más vulnerables.
A la vista está que la política que ha adoptado el PP de recortes sociales no sigue para nada estas indicaciones. Es más, le están dando la vuelta al discurso feminista, hablando de violencia estructural aplicada en el sentido de que la sociedad obliga a las futuras madres a abortar porque se les despide, porque no hay ayudas para ellas… ¿Será por eso que han impuesto una reforma laboral que te penaliza por caer de baja, reducir tu jornada para conciliar o que ignora por completo la ley de igualdad al permitir que todo lo que no esté incluído en el convenio de empresa no sea de aplicación?
El derecho que podamos tener las mujeres sobre nuestro cuerpo ni tan siquiera se lo cuestionan, porque para este gobierno, anclado en la época de los dinosaurios, no existe.
Queda más que demostrado que en un año de aplicación de la nueva ley apenas ha habido incremento en el nº de abortos realizados, incluyendo a las menores y a las mujeres migrantes. Las cifras en otros países europeos con leyes similares avalan estos resultados. Entonces, el empeño del nuevo gobierno en retomar y modificar la ley no tiene más explicación que la meramente adoctrinadora: las mujeres estamos en esta vida para parir. Y para cuidar a nuestras hijas o hijos. Y si no, ahí tenemos el ejemplo de la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáez de Santamaria, que tres días después de tener a su bebé estaba dando el callo, pasándose por alto tan campante la obligación de descansar 6 semanas después de parir; derecho que costó años y años de lucha feminista tirado a la basura por el ansia de protagonismo de la niña de Rajoy.
¿Cómo se atreven a dar este ejemplo y luego hablar de violencia estructural hacia las mujeres que desean tener hijos?
Pues la respuesta es muy sencilla: desde su doble moral, capitalista y patriarcal, que sólo nos quiere para mantener gratis su estado de bienestar. Eso sí, calladitas y sumisas. Como antes.
Isabel Pérez Ortega, Secretaría de la Mujer CGT
Fuente: Isabel Pérez Ortega, Secretaría de la Mujer CGT
