Los trabajadores de la depuradora municipal lograron ayer, tras la concentración mantenida a las puertas de la instalación, en el polígono El Portal, que la empresa concesionaria del servicio, Aqualia Servio Integral del Agua, les abonara las nóminas pendientes, que en algunos casos se habían acumulado por tres meses.
La acción, apoyada por CGT, se desarrolló de forma pacífica durante los 20 minutos del bocadillo de los que disponen los 20 trabajadores de la depuradora.
Además del pago de las nóminas, los empleados de Aqualia reivindicaban el cumplimiento del convenio colectivo por parte de la empresa, sobre todo en lo relacionado a cuadrantes de trabajo y salud laboral. Precisamente en este último aspecto, los trabajadores mantienen dos denuncias en relación al problema de las inundaciones en las zonas de servicios del personal, algo que ya ha empezado arreglarse, y por la falta de tratamiento terciario del agua que se utiliza en las instalaciones de la depuradora para riego, limpieza y mantenimiento.
Además, el delegado sindical, José Llamas, acusa a la empresa de “amenazas y coacciones a los trabajadores desde que se produjo el cambio en la dirección”.
Llamas indica que“no sabemos si la empresa quiere presionar a Aguas de Jerez (empresa municipal responsable del servicio) de cara a la negociación de un nuevo contrato, ya que el actual vence a principios de año”.
“Nosotros lo único que pretendemos es que se cumpla el convenio y dignificar nuestro trabajo”, explica el delegado sindical de la depuradora municipal.
Fuente: alejandro hernández/publicacionesdelsur