Bajo el lema «Los derechos sociales no se recortan, se defienden», una marea amarilla inundó ayer las calles de Santa Cruz de Tenerife. Convocadas por el movimiento 15-S, cerca de 2.000 personas exigieron derechos sociales «de calidad» y dejar claro su rotundo no a la privatización y externalización de los servicios que presta el tercer sector.
Es la primera vez que se celebra en Canarias y de manera simultánea en tres islas, Tenerife, Lanzarote y Gran Canaria, una manifestación para reivindicar y defender medidas justas y dignas para las personas que se dedican al sector de los cuidados de la sociedad.
La movilización empezó a las 18.30 horas en la plaza Weyler y transcurrió hasta la plaza Candelaria, donde se expusieron las principales reivindicaciones de los integrantes y representantes de las entidades adheridas: los colegios oficiales de Trabajo Social de Santa Cruz de Tenerife y de Las Palmas de Gran Canaria, el de Psicología de las dos provincias de Canarias, la Asociación de Cuidadoras Acufade, Acampada por el Derecho a la Vivienda, Adissur, la Asociación Canaria de Personas con Trastorno de Desarrollo Generalizado (Actrade), Madres por la Discapacidad, Somos Red, Asamblea en Defensa de Nuestra Tierra, la asociación Laurisilva y Asamblea 7 Islas o la CGT entre otras. Pero también muchos ciudadanos que quisieron apoyar la lucha del sector y la falta de protección a la tercera edad.