La implantación, o mejor dicho, la imposición del PEIT sigue su curso y con ello el empeño del Banco en incrementar sus beneficios a costa de los trabajadores. El desmantelamiento de los Servicios Centrales sigue adelante con la externalización del trabajo a empresas subcontratadas, en algunos casos ubicadas en otros países, al tiempo que la red de oficinas se está viendo sacudida por una profunda reorganización, con la consiguiente reducción de empleo y pérdida de calidad en la atención a la clientela. Una situación en oficinas que, con toda seguridad, se agravará con la llegada de la época de vacaciones y la multiplicación de los problemas que ello implica, sobre todo si no se realizasen las contrataciones necesarias para cubrir las vacantes que se producirán.
El Banco, obligado por las movilizaciones realizadas en muchas zonas, y en las que ha quedado patente el malestar reinante entre los trabajadores, mantiene con la representación sindical, desde hace varias semanas, unas conversaciones que hasta ahora no han dado resultado satisfactorio alguno. Unas conversaciones en las que los representantes de la empresa no muestran la necesaria voluntad negociadora, limitándose a ofrecer a los Sindicatos fórmulas de acuerdo protocolarias carentes de contenido real.
En CGT seguimos reclamando una verdadera negociación en la que se atiendan las demandas que planteamos los trabajadores. Una negociación que debe servir para asegurar el mantenimiento y la calidad del empleo en el Banco y en las empresas subcontratadas que trabajan para él ; para mejorar las ofertas de prejubilación y para garantizar el respeto escrupuloso de la voluntad de elección de cada persona y de los derechos laborales, individuales y colectivos. Esto es lo que proporcionará una verdadera tranquilidad a la plantilla y no las campañas de imagen, con inversiones millonarias en el patrocinio de programas televisivos o eventos deportivos, que son tan del gusto de la cúpula directiva.
Hechos y no palabras es lo que se necesita. Es lo que hemos exigido en los últimos meses y es lo que demandamos con voz potente y clara en la concentración del pasado 8 de Mayo. Esa debe seguir siendo la exigencia común frente a una dirección que se niega a tener en cuenta las reivindicaciones más elementales de la plantilla.
Las conversaciones con el Banco no han dado frutos y no se puede consentir que la dirección quiera “marear la perdiz”. Desde CGT entendemos que es responsabilidad del conjunto de los Sindicatos seguir con las movilizaciones, dando pasos inmediatos que aumenten el nivel y la contundencia en la respuesta de la plantilla frente a las imposiciones de la empresa. Desde CGT asumimos esta responsabilidad, convencidos de que el Banco sólo tendrá en cuenta nuestras reivindicaciones si las planteamos con la suficiente firmeza y acompañadas de las necesarias participación y movilización colectivas.
Es el momento de hacer todo lo posible para frenar las negativas repercusiones de los planes del Banco. Por ello convocamos a una nueva concentración, el próximo martes, 24 de junio a las 18,30, en Alcalá, 16.
No a la destrucción de empleo, no a las externalizaciones.
Por un empleo de calidad, no a las subcontratas.
Por el respeto a los derechos laborales y de representación sindical
24 de junio 2008 – Alcalá 16, Madrid – 18,30 horas
Fuente: CGT BBVA Madrid
