El Banco Santander lleva inmerso en diferentes procesos de reestructuración de plantilla mediante Expedientes de Regulación de Empleo desde el 2013. En todos los EREs llevados a cabo hasta la fecha entre esa fecha y la actualidad, unidos a los del extinto Banco Popular, se han destruido más de 15.000 empleos.

Una herramienta que debería ser para casos excepcionales la está utilizando el Banco de manera sistemática para la destrucción de miles de puestos de trabajo, algo que ninguna otra empresa del sector ha hecho a pesar de atravesar las mismas situaciones de mercado.

En la actualidad nos vemos inmersos en un proceso por el que se pretenden llevar por delante, en el mejor de los casos, 4.000 puestos de trabajo, ello sin olvidarnos de la precarización de las condiciones laborales de quienes sean externalizados a empresas de servicios.

Una herramienta que debería ser para casos excepcionales la está utilizando el Banco de manera sistemática para la destrucción de miles de puestos de trabajo, algo que ninguna otra empresa del sector ha hecho a pesar de atravesar las mismas situaciones de mercado.

En la actualidad nos vemos inmersos en un proceso por el que se pretenden llevar por delante, en el mejor de los casos, 4.000 puestos de trabajo, ello sin olvidarnos de la precarización de las condiciones laborales de quienes sean externalizados a empresas de servicios.

Dichas externalizaciones suponen una utilización fraudulenta de la legislación vigente, dado que llevarían a otras empresas tareas que actualmente se realizan en el Banco y que son parte fundamental del negocio bancario, pero su externalización supondría un ahorro de costes para la entidad, así como una precarización en las condiciones de lxs compañerxs externalizadxs.

A esto le sumamos unas deplorables condiciones de salida ofertadas, lo que pone de manifiesto que para el Banco Santander los beneficios están claramente por encima de las personas. Y no olvidemos que son precisamente las personas las que con su esfuerzo y dedicación diaria hacen que esos beneficios se incrementen año a año.

Por estos motivos CGT consideramos que ha llegado el momento de salir a la calle a reivindicar la defensa de todos y cada uno de los puestos de trabajo. Porque aquí no sobra nadie y todxs unidxs debemos mostrar al Banco Santander que Galicia se opone a sus políticas de destrucción de empleo. Porque la precarización del sector bancario redundará negativamente en toda la comunidad gallega.

Este sábado 12 de diciembre a las 12.00 nos vemos en el Cantón Grande de A Coruña y en el cruce de Colón de Vigo unidxs en la lucha por los puestos de trabajo del sector bancario.

 


Fuente: Sección Sindical de CGT en Banco Santander Galicia