La Coordinadora del sector del automóvil, de la FESIM-CGT, reunida en Zaragoza ha analizado la actuación tanto de las empresas constructoras como de las auxiliares con la presentación de EREs en las últimas semanas.
La Coordinadora del sector del automóvil, de la FESIM-CGT, reunida en Zaragoza ha analizado la actuación tanto de las empresas constructoras como de las auxiliares con la presentación de EREs en las últimas semanas.
La presentación de los datos expuestos por los participantes en esta reunión ha llevado a las siguientes valoraciones y conclusiones :
En la mayoría de las empresas los planteamientos de excedente no responden sólo a la caída de ventas, si no a la voluntad de aprovechar la psicosis de crisis para realizar restructuraciones, aumentos de productividad y cambio de contratos fijos por eventuales. En efecto, las reducciones de producción respecto a 2007 significan generalmente menos del 8% y sin embargo la aplicación de EREs se realiza en tantos por ciento mucho más elevados. Las empresas están solicitando el desempleo para sus plantillas antes de producirse los efectos reales sobre las producciones. Aunque los datos de ventas en España hablan de más de un 20% de descenso, las ventas en Europa y en el resto del mundo apenas llegan a un descenso del 2%. Teniendo en cuenta que los coches producidos en España se destinan en un 70% a la exportación, se desmoronan la mayoría de las justificaciones de las empresas para pedir los EREs. Desde la Coordinadora del Auto de la FESIM denunciamos que una de las causas de la actual situación de crisis ha sido la actuación de las multinacionales del auto que han llevado a cientos de miles de trabajadores a rebajar sus salarios y condiciones de vida por medio de acuerdos de dobles escalas salariales, aumentos de productividad y flexibilidad, empobreciendo a la población y por tanto ayudando a la tan cacareada crisis. Insistimos y revindicamos que esta crisis ha de ir a cargo de unas empresas que en los últimos 10 años han tenido, en el conjunto del sector, más de 15.000 millones de € de beneficio, además de las aportaciones directas en compra de materiales a las casas matrices, valoradas en otra cantidad similar de beneficio. Por ello exigimos a las administraciones públicas, estatales y autonómicas, el rechazo de los EREs a las empresas y la exigencia de soluciones pactadas con los trabajadores en las que sean las empresas quienes soporten el coste de esta situación por medio de la reducción de la jornada, el rebaje de los inhumanos ritmos actuales de producción, y la condonación de las deudas de bolsas de horas acumuladas, sobre todo por los aumentos de productividad de los últimos años.Desde el conjunto de secciones sindicales de la CGT en el auto vamos a desarrollar en lo concreto de cada empresa, plataformas reivindicativas en línea con estas propuestas, convocando a las plantillas afectadas a las movilizaciones que sean necesarias para que sean las empresas quienes carguen con los costes de esta situación y así impedir que de nuevo la voracidad y avaricia de las empresas lleve a los trabajadores del auto a nuevas pérdidas de condiciones de caída y trabajo.
Fuente: CGT FESIM