"Me voy a atar y cuando vengan los guardias les diré que no tengo para comer"
Una mujer se encadenó esta mañana en las puertas del taller de montaje de la planta de Seat en Martorell (Barcelona) para protestar contra el despido de sus dos hijos, de 19 y 33 años de edad, respectivamente, frente a un grupo de trabajadores despedidos de la compañía.
«Me voy a atar y cuando vengan los guardias les diré que no tengo para comer»

Una mujer se encadenó esta mañana en las puertas del taller de montaje de la planta de Seat en Martorell (Barcelona) para protestar contra el despido de sus dos hijos, de 19 y 33 años de edad, respectivamente, frente a un grupo de trabajadores despedidos de la compañía.

Fuentes de CGT explicaron que la mujer y el grupo de trabajadores, que portaban pancartas de protesta contra los despidos, permanecieron en el lugar durante cerca de una hora y media. Agentes de la Guardia Civil se acercaron al lugar pero no hubo «ningún problema» con los manifestantes, que pactaron la hora de finalización del acto de protesta, indicaron las citadas fuentes.

La mujer explicó, en conversación telefónica con Europa Press, que su hijo menor fue despedido hace seis meses después de estar tres años en la escuela de aprendices de Seat, mientras que el hijo mayor ha resultado afectado por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por la compañía, después de 9 años en la empresa.

«Me voy a atar y cuando vengan los guardias les diré que no tengo para comer», aseguró, y añadió que «llevo mucha rabia y mucha ira» por el despido de sus hijos.

La mujer, cuyo marido es un jubilado parcial de Seat, denunció la persecución sindical como la causa del despido de sus hijos y se mostró muy preocupada por el futuro laboral de su familia.


Fuente: EUROPA PRESS