A las diez de la mañana del día que entra en verano en Sevilla, el calor no repele todavía los cuerpos. En la Glorieta 1º de Mayo el cielo aún es gris y unas nubes oscuras amenazan lluvia. En la puerta del Parque Amate un policía local charla con los organizadores de la manifestación que recorrerá los barrios dentro de la iniciativa Rodea el Parlamento el Parlamento andaluz que se lleva a cabo este 21 de junio.
A las diez de la mañana del día que entra en verano en Sevilla, el calor no repele todavía los cuerpos. En la Glorieta 1º de Mayo el cielo aún es gris y unas nubes oscuras amenazan lluvia. En la puerta del Parque Amate un policía local charla con los organizadores de la manifestación que recorrerá los barrios dentro de la iniciativa Rodea el Parlamento el Parlamento andaluz que se lleva a cabo este 21 de junio.
Un grupo de militantes del sindicato CGT descarga de un pequeño camión banderas, pancartas, botellas de agua, tambores y un generador. Los laterales del vehículo están cubiertos por una gran lona en la que se puede leer “La lucha empieza en tu barrio, organízate. Algunos de ellos lucen petos fosforescentes de color naranja con la palabra ‘organización’ impresa en pecho y espalda. Los ocho agentes de la policía local observan atentos sus movimientos.
Cuando la marcha inicia su recorrido por Federico Mayo Gallarre al son de Manu Chao, los corredores de footing y los ciclistas mañaneros se detienen para ver pasar la comitiva. Sólo un furgón de la Policía Nacional hace de cierre, mientras los manifestantes corean “sí, sí, sí, que se vayan a Estoril” al comenzar su recorrido por las calles de la barriada Tres Barrios-Amate, una de las más depauperadas de la ciudad.
Además de la organización sindical CGT-A, con su secretario general Miguel Montenegro a la cabeza y que ha traído gente desde Málaga en un autobús y desde Jaén, Huelva, Cádiz y Córdoba en coches particulares, los miembros de la asamblea del 15M de Cerro-Amate y varios círculos de Podemos conforman el núcleo de la protesta. Alrededor de doscientas personas enarbolando banderas y estandartes se proponen cruzar la ciudad de este a sur para incorporarse en las inmediaciones del Parlamento a la columna principal que parte de la estación de Santa Justa.
También hay representación de colectivos muy específicos, luchas sectoriales que están en su máximo apogeo, como la Coordinadora de Desempleados de Cádiz, que porta una pancarta en la que reza “por el empleo y la dignidad”, o el CTP de Correos de Córdoba con otra contraria a su cierre y a los despidos.
En la esquina de entrada a la Avenida de El Greco, en el Polígono de San Pablo, un tipo que hace estiramientos en el carril bici abandona sus ejercicios para aplaudir a la comitiva. Lo imitan algunos transeúntes que pululan por las aceras. Cuando atraviesan Kansas City y el puente trasero a la estación de Santa Justa comienzan a caer las primeras gotas de una lluvia tenue, como vergonzosa. El bochorno, sin embargo ya es considerable a esas horas. La asamblea 15M de San Pablo se ha sumado a la marcha durante el paso por su barrio.
Una mujer se sube a la trasera del camión que encabeza la protesta, entre los altavoces y el generador, y se dirige a los asistentes micrófono en mano. Es una integrante de la corrala Bloque Malasaña de Málaga y solicita ayuda para poder comprar alimentos. Cuando concluye su alocución se apea y atraviesa la manifestación hucha en mano recogiendo las aportaciones de los manifestantes.
La columna enfila entonces la calle Francisco de Ariño camino de la Avenida de Miraflores. “Carmen y Carlos, no estáis solos” corean en recuerdo de los dos condenados por el piquete de la huelga general. Al final de Miraflores tuercen a la izquierda para tomar la Ronda de Pío XII. La lluvia ya hace rato que ha cesado, pero el recibimiento frío en las inmediaciones de la cámara andaluza hace presagiar que el mal tiempo aún no se ha disipado del todo. Consignas de unidad presiden la entrada de la columna en la parte de la Ronda Histórica donde se ha dispuesto el escenario.
Allí ya hace rato que los dirigentes que van a participar en el acto final se han subido en la tarima portando una pancarta. Miembros del servicio de organización han formado un cordón de seguridad alrededor del escenario. Son gente del SAT y del PCE, gente curtida. Cuando algún integrante de la Columna de Amate intenta traspasarlo se produce un forcejeo. Empujones, imprecaciones y alguna que otra mala cara. Alguien conmina al periodista a que no hable de ello, que se limite a contar lo que pasa en el escenario.
Finalmente, el portador de la bandera rojinegra de la CGT no logra traspasar el férreo cordón de seguridad. Arriba, en el estrado, Diego Cañamero lanza un rotundo llamamiento a la unidad de la izquierda, a la formación de un frente popular de izquierdas. El frente amplio, lo llaman. Luego todo se dispersa con lentitud, como el azucarillo en el café.
Gregorio Verdugo.
Fotos:
http://sevillareport.com/social-movimientos-sociales/columna-amate-21j-recorre-barrios-sevilla/