Sergio de Castro Sánchez es miembro del Col.lectiu Zapatista «EL CARAGOL» y viene colaborando en los últimos meses con la Secretaria de Relaciones Internacionales de la CGT aportando sus vivencias y análisis acerca de la lucha que se esta sucediendo por la vida y la libertad en Oaxaca (México), una lucha que no se conforma con la reforma del actual estado de las cosas sino que siente que la transformación social pasa inevitablemente por la cimentación, desde abajo, de otro mundo . Él es profesor de filosofía y colaborador de varias publicaciones de información alternativa en el Estado Español, como Rebelión, La Haine, Diagonal, Kaosenlared o Rojo y Negro, así como en medios de Oaxaca tales como oaxacalibre.
– En el contexto de las pugnas y discrepancias en torno a la participación o no de las organizaciones que conforman la APPO y el resto del movimiento oaxaqueño en las elecciones políticas ¿cuál es la salida que se vislumbra ?
Cuando algunos grupos de la APPO plantearon que se debía “entrarle” a las elecciones al Congreso Estatal y a las municipales a celebrarse a principios de agosto y de octubre respectivamente, parecía que se iban a crear dos bloques : el electoralista y el no-electoralista. Sin embargo eso ha sido así sólo a medias. Por que la forma de actuar del Frente Popular Revolucionario (FPR) y otros en este asunto ha sido tan maquiavélica, tan poco honesta, que en realidad muchos de los grupos que si estaban por lo electoral han acabado enfrentándose también al FPR. Existe un acuerdo casi generalizado de que el FPR sólo busca el poder político y que está dispuesto a todo por conseguirlo. Ha habido denuncias muy claras por parte de por ejemplo David Venegas (miembro del Consejo Estatal y de VOCAL) que considera que las constantes difamaciones y acusaciones en falso que el FPR ha dirigido contra él han sido pieza clave para que ahora se encuentre en la cárcel. Según cuenta, uno de sus torturadores le confesó que Florentino López (miembro del FPR y portavoz de la APPO) había sido puesto en libertad tras ser detenido y recibir órdenes “de arriba” para que lo liberaran.
En los últimos días, el FPR ha cotraatacado acusando a los miembros de “La Otra” de romper con la unidad de la APPO y de ser los responsables de la violencia ejercida por el Estado el día 25 de noviembre.
Este fin de semana ha habido una nueva Asamblea Estatal de la APPO. Todavía no tengo noticias acerca de qué se ha acordado. La página de la APPO dice que se ha conservado la unidad, pero personalmente creo que, si ha sido así, es muy frágil y muy dependiente de los efímeros intereses electorales de unos pocos.
Paralelamente, Voces Oaxaqueñas Construyendo Autonomía y Libertad (VOCAL) sigue con un trabajo muy duro por los constantes ataques que recibe incluso desde la APPO, pero con mucha claridad acerca de su posición política : construir la autonomía de los pueblos al margen de las estructuras electorales
– ¿Sigue la represión en Oaxaca ?
Actualmente se utilizan varias expresiones para describir cual es la situación : “Guerra de baja intensidad” o “represión selectiva” son las algunas de ellas. El hecho es que las órdenes de detención siguen su curso y el poder sigue violando la ley y las garantías individuales para encarcelar a quienes siguen en la lucha. Los luchadores sociales siguen bajo una presión tremenda : son criminalizados, perseguidos, reprimidos, torturados, etc. El caso de David Venegas es bien conocido por los lectores de esta revista. Se le “fabricó” el delito de narcomenudeo no sólo para encarcelarle, sino también para desacreditar a todo el movimiento barricadero del que, según los poderes políticos y mediáticos, es su líder. Pero hay más casos. Hace unos días desaparecieron tres miembros del Ejército Popular Revolucionario. Hasta este momento no se sabe de su paradero. Se sospecha que están siendo interrogados y torturados.
– ¿Cual ha sido el papel de los medios de comunicación durante el conflicto ?
Los medios de masas han hecho su papel de siempre : fijarse sólo en lo más llamativo del conflicto (barricadas, enfrentamientos, etc.) y utilizarlo para criminalizar a los luchadores sociales y dar soporte al gobierno en sus planes represivos.
En cuanto a los medios alternativos, su papel ha sido desigual. Desgraciadamente, y yo mismo lo hice cuando llegué a Oaxaca al no conocer bien la naturaleza del movimiento, se han fijado más en los “líderes” de la APPO que en la gente, que era realmente la protagonista. En realidad es mucho más fácil tener acceso a la información que los grupos de poder al interior de la APPO quieren hacer llegar a la gente, que hacerlo al punto de vista que no busca los medios porque su intención no es en absoluto imponer sus planteamientos, sino la de llegar a construir con el pueblo un discurso y una acción alternativas al sistema impuesto desde arriba. Del punto de vista de esos verdaderos protagonistas casi ni se escribió durante los meses de mayor efervescencia del movimiento. Era mucho más fácil reproducir las declaraciones de los portavoces de la APPO y tomarlas como la voz del pueblo.
Tras la represión del 25 de noviembre los medios casi se han desentendido de Oaxaca. Ahora no hay nadie allí informando de lo que ocurre.
– ¿Qué papel han tenido las corrientes libertarias en la insurrección ?
Los grupos libertarios han sido de los más maltratados por los medios, incluso alternativos. La prensa que defendía al movimiento los trató en su momento casi como héroes al jugarse cada día la vida en las barricadas y en los enfrentamientos con la policía. Pero nada se habló acerca de cual era su propuesta política y social, basada en el contacto con el pueblo y en la construcción de una alternativa desde los presupuestos de “La Otra Campaña”, es decir, “abajo y a la izquierda”.
Algunos entraron el Consejo Estatal de la APPO. Otros vieron en su estructura un verticalismo y un afán de protagonismo por parte de algunos sectores que les hizo decidir seguir en la lucha desde fuera de la APPO. En este contexto hubo iniciativas muy interesantes como la de la Okupa, un proyecto de ocupación en el centro de Oaxaca basado en el modelo asambleario y autogestivo y cuyas propuestas estaban al margen de la APPO. Su discurso político, que caló profundamente en la población, defendía que la solución no era la destitución del Gobernador Ulises Ruiz por otro (ni siquiera salido de la APPO) sino la construcción de una nueva estructura política en el estado y en todo México.
Hay que resaltar además, que el discurso libertario, y más concretamente el magonista, es el único que realmente ha sido construido en base a los planteamientos de los pueblos originarios. Otras corrientes ideológicas en el seno del movimiento han defendido los derechos de los indígenas pero sin escuchar realmente cuales son sus propuestas.