A mediodía de hoy se hacía pública la sentencia del juicio celebrado el pasado día 10 de mayo contra cinco activistas de la organización ecologista Greenpeace por una protesta pacífica contra la guerra de Irak, hace dos años, frente a la base militar de Rota en Cádiz. La sentencia absuelve de todos los cargos a tres de los activistas encausados y dicta penas de seis meses de prisión por delito de desobediencia a la autoridad para el que fuera capitán del Rainbow Warrior durante la acción, Daniel Rizzotti y una multa de diez días por una falta contra el orden público para Phillip Walter Lloyd. La organización ecologista valora en estos momentos las acciones a tomar y la posibilidad de recurrir la condena del capitán.
imagen : Los cinco activistas de Greenpeace que se enfrentan a 12 años de prisión por decir NO a la Guerra
A mediodía de hoy se hacía pública la sentencia del juicio celebrado el pasado día 10 de mayo contra cinco activistas de la organización ecologista Greenpeace por una protesta pacífica contra la guerra de Irak, hace dos años, frente a la base militar de Rota en Cádiz.
La sentencia absuelve de todos los cargos a tres de los activistas encausados y dicta penas de seis meses de prisión por delito de desobediencia a la autoridad para el que fuera capitán del Rainbow Warrior durante la acción, Daniel Rizzotti y una multa de diez días por una falta contra el orden público para Phillip Walter Lloyd. La organización ecologista valora en estos momentos las acciones a tomar y la posibilidad de recurrir la condena del capitán.
imagen : Los cinco activistas de Greenpeace que se enfrentan a 12 años de prisión por decir NO a la Guerra
“La sentencia se ajusta mucho más a los hechos que la acusación desproporcionada y abusiva de la Fiscalía.”, -ha declarado Juan López de Uralde, director ejecutivo de Greenpeace- “Esta sentencia cierra una etapa negra marcada por el intento de silenciar a Greenpeace y sus campañas. De alguna manera nos sentimos reforzados tras esta sentencia que reconoce la encomiable labor de nuestra organización. Seguiremos trabajando, como hasta ahora, por la defensa del medio ambiente y la paz.”
En el juicio celebrado la pasada semana en el Juzgado Nº 1 de lo Penal de Cádiz el Fiscal rebajaba su petición inicial de penas para los encausados de 12 años a un total de casi 9 años de prisión. Así las peticiones del Ministerio Fiscal quedaban en tres años para el argentino Daniel Rizzotti por desobediencia y resistencia grave, dos años de prisión para el neozelandés Phillip Walter Lloyd por resistencia grave, dos años y catorce fines de semana para el español Carlos Bravo por resistencia grave y lesiones por imprudencia y nueve meses de prisión por desobediencia tanto para la española María Teresa Ambrós como para el norteamericano Lawrence Martin.
“Las acciones de Greenpeace no serían posibles sin miles de socios y simpatizantes. Estamos especialmente agradecidos a los miles de personas y decenas de organizaciones que nos han apoyado en este caso”, añadió Juan López de Uralde.