– Zapatero ha presentado la reducción de publicidad en TVE como una de las soluciones contra la crisis económica. ¿Qué valoración tiene de esto ?
Lo primero es que la televisión pública debería estar financiada a cargo de los presupuestos del Estado, o de las Autonomías. La reducción de la publicidad nos parece bien. El problema es que el Gobierno no ha dicho conqué nos vamos a financiar. Lo que nos tememos es que van a hacer una televisión mínima con muy poquito dinero ; una televisión bonsái.
– Entonces el objetivo principal es beneficiar a las cadenas privadas…
Sí, sí. Ahora mismo están pasando por un momento muy malo, no hay pastel publicitario para todas. Se sabía hace tiempo que era muy difícil mantener tantos canales generalistas en abierto, y con la inclusión de Cuatro y La Sexta no hay suficiente para todos.
– Pero ¿no recuerda esto a la estrategia de hacer deficitario un ente público para privatizarlo ?
Espero que no. Nosotros tenemos la sensación de que esto es una privatización encubierta de TVE. Porque muchos de los servicios se están externalizando a empresas privadas. Aquí se ha hecho un ERE muy fuerte. Una parte muy importante de la producción audiovisual son los conocimientos y a una parte importante de los mayores de 55 años los han prejubilado. Son gente muy válida con conocimientos muy altos, que con la nueva gente que entra podían hacer una televisión de mucha calidad.
Han hecho un ERE con la excusa de que TVE no era rentable, que no es cierto. Se ha echado a mucho personal, pero como ahora no hay suficiente se está externalizando a productoras. Esto es una privatización encubierta.
No sé si llegarán a hacer lo que hace Esperanza Aguirre con Telemadrid, que ya ha dicho que quiere privatizarla.
– ¿No vamos camino de que haya más poder de los medios en menos manos ?
Bueno. El poder informativo está ya prácticamente repartido en dos manos. Lo que pasa es que el papel de la televisión pública es dar un servicio de calidad, que se está consiguiendo más o menos autónomo de los diferentes gobiernos.
Se trata de que la televisión pública de servicios que las televisiones privadas, que se mueven por el afán de lucro, no van a dar ; servicios a minorías, por ejemplo, que cuestan mucho dinero y no tienen las solvencias que tienen un reallity show. La razón de ser de la televisión pública es ofrecer programas de calidad aunque no sean rentables.
– Pero, ¿no es posible televisión de calidad, pública y rentable ?
Sí, claro. TVE tiene capacidad para ser rentable. Podemos dedicarnos a hacer programas de baja calidad y muy baratos. Pero la televisión pública tiene que ofrecer otra cosa distinta ; contenidos de calidad, educativos…, sin dejar de tener en cuenta la audiencia. Tampoco puedes hacer como La 2, que hace programas de gran calidad pero con un 3% de audiencia.
– Pero ¿no crees que hay un interés en poner una cosa en contradicción con la otra ? La gente ve lo que se le ofrece y en el horario que se le ofrece.
Absolutamente correcto. Ese es una de las exigencias que tenemos desde CGT. Que se potencien programas de alta calidad de contenido, pero como hay que competir en publicidad se está perdiendo esto.
Lo que no estamos de acuerdo es con la propuesta del Gobierno. La Vicepresidenta anda diciendo que no se pueden cargar más los Presupuestos del Estado, y están buscando otras formas de financiación. Y una fórmula es la de Sarkozy, que nos parece francamente mala porque te pones en manos de tu competencia, de las televisiones privadas que pueden declarar o no la cantidad de publicidad o ingresos que tienen… o como ahora les haces la competencia, están tres meses sin pagar.
Para nosotros el modelo de financiación es pública, sin publicidad. Pero como ahora el Estado no está preparado para poder asumirlo, la propuesta sería que la financiación sea pública pero que los ingresos por publicidad reviertan en el Estado.
El modelo de la BBC nos parece muy interesante. Pero en vez de estar financiado con un canon, en el que todo el mundo paga lo mismo, que se haga a través de la declaración de la renta, que va por bloques.
– ¿No es inmoral que el presidente de TVE esté cobrando 240.000 euros anuales con la cantidad de despidos que se están produciendo ? Pese a que anunciaron una congelación salarial en los cargos ejecutivos.
Nos parece muy mal, claro. De hecho emitimos una hoja informativa diciendo que la medida nos parece ridícula, y de cara a la galería. Teniendo en cuenta lo que ganan los consejeros.
En esta empresa siempre ha habido directivos externos, pero también directivos que eran trabajadores de la casa. Con esta directiva se ha disparado el número de directivos externos con sueldos que se desconocen. Mientras los trabajadores que están entrando por oposición están ganando 1.000 euros, profesionales cualificados. Aquí se entra siendo mileurista.
Se congelan el sueldo después de habérselo subido todos los años bastante.
– ¿Qué te parecería una escala salarial con mínimos y máximos ?
Nos parece inmoral que nadie gane esos sueldos en ningún sitio. Debería haber unos máximos, unos topes, incluyendo el dinero que se gana de otras cosas, de dar charlas en sitios, en dietas, coches oficiales…
– ¿Y qué te parecería reducir un 10% de gastos superfluos y de redes clientelares del Estado para reinvertirlo en empleo, servicios sociales o tejido productivo ?
Hay cosas que son obviamente superfluas. Como lo que está haciendo el PP en Madrid en los Teatros del Canal que es absolutamente inmoral, mientras están escatimando salarios a los trabajadores de los servicios públicos, como Telemadrid. Hay que apoyar la cultura, pero a la cultura no le hacen falta espacios para vanagloriarse.
– ¿Quieres añadir algo más ?
Lo que hace falta son fondos suficientes para tener una televisión pública como el modelo de la BBC, y no una televisión Bonsai que se limite a emitir lo que otras productoras privadas realicen, y solo sirvamos para mantener la imagen. Para tener una televisión competitiva y de calidad hace falta dinero, no se puede hacer con pocos medios