La concentración llegó hasta la Delegación del Gobierno, donde los pequeños pidieron la mediación española para acabar con la ocupación marroquí en la zona
Quinientos niños saharauis acogidos por familias de la región se acercaron ayer hasta la capital para participar, junto con sus ’padres’ y ’hermanos’ españoles, en una multitudinaria manifestación que la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui organizó en protesta por la penosa situación política y económica que soporta el Sahara. La masiva concentración pretendía « llamar la atención sobre la difícil vida en esta zona, ocupada por Marruecos, donde se violan constantemente los derechos humanos », advirtió Félix Albillo, portavoz de la asociación.
Tras celebrar un acto institucional de despedida -los niños regresan a su país a finales de mes- en la Feria de Muestras con la presencia de la consejera de Familia, Rosa Valdeón, la manifestación tomó rumbo, de forma pacífica, por las calles de la capital. El grupo iba encabezado por una primera línea de niños que sujetaban una pancarta que rezaba ’Sáhara autodeterminación ¿ya !’ y coreaban gritos en protesta contra la ocupación marroquí. La marcha llegó a las 14.00 horas a la Delegación del Gobierno. Allí el delegado regional, Miguel Alejo, y el subdelegado provincial, Cecilio Vadillo, recibieron a los manifestantes, que hicieron entrega de un manifiesto para que fuera remitido al presidente José Luis Rodríguez Zapatero en el que instan a las autoridades españolas a acabar con el « estado de sitio no declarado » que se vive en el país de origen de estos pequeños.
« Pequeños embajadores »
Familias de todos los rincones de la región se trasladaron hasta la capital para unirse a la protesta de sus niños de acogida, con los que conviven dos meses gracias al programa ’Vacaciones en paz’. « Aprendemos lecciones de respeto y tolerancia de estos ’hijos del desierto’ », comenta Alejandra Scalabrini, la presidenta de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui en Castilla y León.
« Lo que viven hace que estos niños sean incluso más maduros que nosotros mismos », dice Maite, una segoviana que lleva acogiendo a una niña, Mahyuba, durante tres años. Estas familias -que, en su mayoría, repiten en esta experiencia- conocen bien el problema saharaui gracias a estos « pequeños embajadores », como los llama Scalabrini.
« Nunca hemos ocultado el componente político de este programa », recuerda Scalabrini. Es por ello que este año han decidido dar forma a esta militancia con una multitudinaria protesta por las calles de la capital. Desde la asociación se muestran esperanzados. « Algo va a cambiar. EE. UU. está también presionando al Gobierno marroquí a aceptar las resoluciones de la ONU y el pueblo saharaui oprimido ha empezado su propia intifada contra los colonos », declara su presidenta.
El curso en la región
El deseo generalizado durante los actos celebrados ayer era el de poder celebrar, en un futuro, que los niños no tengan la necesidad de pasar sus veranos en España. « Eso significaría que tienen agua y comida suficiente en sus hogares », puntualizó Rosa Valdeón.
A su llegada se somete a los pequeños -de entre 7 y 13 años- a una revisión médica. La asociación puso de manifiesto el terrible problema de desnutrición que soportan muchos niños en el Sáhara y el creciente diagnóstico de casos de celíacos entre la población infantil, por la falta de verduras y frutas. « Muchos de estos niños parecen más pequeños de lo que en realidad son. Su crecimiento va, a veces, hasta dos años por detrás del ritmo normal de los niños españoles », recuerda Sergio Peña, otro miembro de la asociación en Burgos.
Para solucionar estos y otros problemas, como los vinculados con la formación de los pequeños, la asociación está potenciando el programa ’Madrasa’, una iniciativa que pretende que niños del Sahara pasen el curso escolar en colegios de Castilla y León y veraneen en su país -al contrario que ahora-, pero que aún está dando sus primeros pasos.| ACCIÓN SOCIAL | ACOGIMIENTOS INFANTILES