El 13 de octubre de 2013 se beatificado en Tarragona 522 religiosos muertos durante la Guerra Civil. La Conferencia Episcopal afirma que estas personas son mártires de la fe, víctimas de la persecución religiosa que según ellos tuvo lugar durante "los años treinta" del siglo XX.
Así es como nos cuentan la historia los que ganaron la guerra. Lo que no nos explican es que la Iglesia había tomado y continuó tomando parte activa en los conflictos sociales de aquella época. Defendió con violencia un estado católico, que no hubiera libertad de culto, ni escuelas laicas, ni divorcio, ni matrimonio civil. Pero, sobre todo, luchó por sus privilegios y para mantener su poder en las instituciones.
Así es como nos cuentan la historia los que ganaron la guerra. Lo que no nos explican es que la Iglesia había tomado y continuó tomando parte activa en los conflictos sociales de aquella época. Defendió con violencia un estado católico, que no hubiera libertad de culto, ni escuelas laicas, ni divorcio, ni matrimonio civil. Pero, sobre todo, luchó por sus privilegios y para mantener su poder en las instituciones. La Iglesia quería recuperar las subvenciones estatales y las grandes propiedades que mantenía fuera de la producción y que le servían para especular.
Cuando se produjo el golpe de estado, la Iglesia tomó partido rápidamente partido del lado de los fascistas, denominándose el levantamiento franquista «Cruzada Nacional» y guerra santa en defensa de la religión. Bendijo las armas y las banderas de los batallones que partían hacia el frente. Sacó al dictador bajo palio, celebró los bombardeos financiados con el dinero de la Alemania nazi y la Italia fascista, y fue (y sigue siendo) cómplice de los asesinatos, paseados, torturados, desaparecidos,… Esta Iglesia hoy quiere hacernos creer que tan sólo fue una víctima.
Esta Iglesia franquista es la que se reúne del 11 al 13 de Octubre en Tarragona
La Iglesia que se niega a investigar los crímenes del franquismo, la que dice que todos los que aún buscan a sus muertos en las cunetas únicamente buscan la revancha, la que es incapaz de pedir perdón y aceptar que se haga justicia.
Esta es la Iglesia golpista a la que hacemos frente
La Iglesia que quiere controlarnos desde la escuela y hasta el hospital. La Iglesia que quiere condenarnos por lo que hacemos en la cama y dentro de nuestros úteros. La Iglesia que libera a cambio de limitar todas nuestras libertades. Hoy como ayer.
En la Iglesia rica, riquísima en propiedades gracias a un expolio de siglos y que, sin embargo, cuenta con innumerables privilegios fiscales. La Iglesia de los pobres que no quiere compartir con los y las necesitadas que ella misma provoca. Hoy como ayer.
Hoy como ayer, la Iglesia tiene numerosos privilegios a defender. Y, hoy como ayer, es necesario luchar contra ellos. Durante aquellos famosos años treinta miles de personas, Durruti, Ascaso y muchas personas anónimas salieron a la calle y se organizaron ante la tiranía del fascismo y de la Iglesia que le apoyaba. Hoy toca volver.
Estas beatificaciones no son sólo el homenaje de un grupo religioso a sus muertos. A su detrás se esconde la reivindicación de una estrategia política que nos afecta a todos y todas por parte de una poderosísima organización cómplice de un genocidio. Nos concierne, hay que estar.
Como decía Durruti, al Fascismo no se le discute (ni se le ignora), se le destruye.
Por todo ello os animamos a sumarse a la manifestación que tendrá lugar en Tarragona el día 12 de Octubre, a las 18 horas, en la plaza de los «Desnudos» (Rambla Nova), para expresar nuestro rechazo a estos actos .
No pasarán!
Federación Intercomarcal CGT Tarragona
Federación Comarcal Baix Camp-Priorat CGT
Federación Comarcal Baix Penedès CGT
Fuente: Federación Intercomarcal CGT Tarragona Federación Comarcal Baix Camp-Priorat CGT Federación Comarcal Baix Penedès CGT
