Hoy 18 de julio CGT ha presentado formalmente ante las instancias oportunas la convocatoria de huelga en el GRUPO RENFE, para los días 31 de julio y 1 de agosto.

Los motivos fundamentales que nos llevan a realizar esta convocatoria son:

– Contra la fragmentación de las empresas públicas ferroviarias una y otra vez, liberalizando el Sector para que el beneficio económico que arroja el ferrocarril no vaya a parar a manos privadas. El Ministerio de Fomento está arruinando el ferrocarril público no invirtiendo en la mejora de las infraestructuras, sobre todo en la Red Convencional, y en servicios que beneficien a la ciudadanía garantizando la movilidad como derecho fundamental y universal de los usuarios.

Los motivos fundamentales que nos llevan a realizar esta convocatoria son:

– Contra la fragmentación de las empresas públicas ferroviarias una y otra vez, liberalizando el Sector para que el beneficio económico que arroja el ferrocarril no vaya a parar a manos privadas. El Ministerio de Fomento está arruinando el ferrocarril público no invirtiendo en la mejora de las infraestructuras, sobre todo en la Red Convencional, y en servicios que beneficien a la ciudadanía garantizando la movilidad como derecho fundamental y universal de los usuarios.

    – Contra la política de “tierra quemada” emprendida por este gobierno de privatizar todo lo público, esto va a repercutir gravemente en la SEGURIDAD EN LA CIRCULACION del transporte ferroviario, en la de los usuarios y de los propios trabajadores del ferrocarril, máxime cuando aprueben, por Real Decreto Ley como tienen por costumbre,  el nuevo Reglamento de Circulación. Este proyecto merma drásticamente las exigencias en materia de seguridad, para abaratar los costes de explotación a las empresas privadas que van a operar en el ferrocarril.

      – Por el mantenimiento del empleo público y contra la precariedad del mismo. Reponiendo la plantilla mermada con el ERE y que hace, por ejemplo, que muchos trenes no vayan con interventor, hecho que repercute en la SEGURIDAD de los viajeros y en el descenso de los ingresos recaudatorios de RENFE.

      Ante  esta situación CGT ha convocado un calendario de movilizaciones que empezaran los días 31 de julio y 1 de agosto para que la entrega del ferrocarril publico a las empresas privadas no se lleve a cabo y, en todo caso,  no pase inadvertida socialmente.

      CGT, por tanto, mantiene su coherencia  en su posición en defensa del servicio público ferroviario y en contra de su privatización exigiendo un ferrocarril público, seguro, social y sostenible por ser un sector estratégico para el desarrollo del territorio y  de sus ciudadanos.

      Reyes Cañaveras

      SECRETARIO DE COMUNICACION

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      Fuente: SSF-CGT