Mañana jueves 19 de noviembre de 2009 a las 19 horas se celebrará en la Sala Eutyches del Palacio Ferial y de Congresos de Tarragona el Homenaje a Josep Alomà, histórico militante cenetista de Tarragona (El Catllar, 1909 ; Tarragona, 1993).

Mañana jueves 19 de noviembre de 2009 a las 19 horas se celebrará en la Sala Eutyches del Palacio Ferial y de Congresos de Tarragona el Homenaje a Josep Alomà, histórico militante cenetista de Tarragona (El Catllar, 1909 ; Tarragona, 1993).

Durante el acto, se presentará «Una Utopía, una Esperanza. La historia de José Alomà «, publicado por Arola Editors. El autor del mismo n ’es Ramon Gras y Alomà, nieto del protagonista y autor de un trabajo de investigación sobre su abuelo que fue el punto de partida del libro. Durante el transcurso de la celebración se exhibirá el documental «Alomà», del mismo autor. «Alomà» se distribuirá con el libro publicado por Arola.



La importancia de este acto está fuera de duda para recuperar la memoria de un movimiento y de un persona que formó parte de la historia, pero más allá de eso, el acto es un paso más en la recuperación de una parte de la historia de Tarragona y de los Países Catalanes que a algunos les ha ido mucho y muy bien que se borrase.

Josep Alomà fue primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Tarragona durante la guerra civil. Durante el mismo periodo ejerció de Consejero de Cultura (donde hay que destacar la intensa promoción del teatro, el cine, el deporte, las bellas artes y la música entre las clases populares) y fue el director del Diari de Tarragona (portavoz de la CNT -FAI). De formación básicamente autodidacta, complementó la misma titulándose como maestro de la República durante los años 30, y destacó como presidente del Consejo de la Escuela Nueva Unificada en Tarragona, donde impulsó la pedagogía revolucionaria heredera de Ferrer Guardia.

Gracias a su actuación numerosas personas perseguidas por la represión en la retaguardia republicana pudieron salvar la vida, entre ellas numerosos sacerdotes (Mn Ritort, Mn Esteve, Mn. Parera, Mn Batlle …) y lideró la conservación del Patrimonio de la provincia de Tarragona . En este sentido destacan que pudo evitar con su actuación personal el saqueo de los monasterios cistercienses de Poblet y Santes Creus así como el de la Catedral de Tarragona, con riesgo de la propia vida.

Posteriormente fue Comisario de Compañía al frente de Baza (Granada) y jefe de Propaganda del Ejército del Sur, en el Estado Mayor de Andalucía.

Finalizada la guerra, estuvo recluido en 3 campos de concentración franquistas antes de ser encarcelado en el Castillo de Pilatos y condenado a muerte por «rebelión militar». Sus hermanos Pablo y Santiago murieron como consecuencia de la represión de la dictadura a la inmediata posguerra.

Conmutada la pena por su comportamiento humanitario durante la guerra, permaneció largos años encarcelado y posteriormente fue desterrado de Catalunya, donde no pudo regresar hasta finales de la década de los sesenta.

Durante la Transición política, se abrió un proceso de restitución de las personalidades represaliadas por la dictadura, y Alomà no fue una excepción. Se negó a aceptar la Medalla de Oro de la Ciudad, pues argumentaba que simplemente había actuado en conciencia y las autoridades locales tuvieron que desplazarse a su domicilio para darle la misma.

Josep Maria Alomà y Sanabras murió en Tarragona el 9 de mayo de 1993.