Cerca de 180 detenidos y decenas de heridos fueron el resultado de la actuación policial durante la jornada de huelga general del 14 de noviembre.
Porrazos, balas de goma, golpes… La pasada jornada de huelga general, las calles se volvieron a llenar de gente manifestándose… y de policía. Mucha policía en Madrid, con un dispositivo de 4.500 efectivos, la cuarta parte de ellos antidisturbios llegados de varias partes de España. Pero también mucha policía en Andalucía, con 18.000 efectivos repartidos por la región; en Murcia, con 1.400 efectivos de la Policía Nacional; o en Catalunya, con otros 9.000 mossos d’Esquadra atentos principalmente a la convocatoria paralela de manifestación del 15M y otros colectivos.
Porrazos, balas de goma, golpes… La pasada jornada de huelga general, las calles se volvieron a llenar de gente manifestándose… y de policía. Mucha policía en Madrid, con un dispositivo de 4.500 efectivos, la cuarta parte de ellos antidisturbios llegados de varias partes de España. Pero también mucha policía en Andalucía, con 18.000 efectivos repartidos por la región; en Murcia, con 1.400 efectivos de la Policía Nacional; o en Catalunya, con otros 9.000 mossos d’Esquadra atentos principalmente a la convocatoria paralela de manifestación del 15M y otros colectivos. Mucha policía en las calles y muchos choques con piquetes y manifestantes que volvieron a dejar imágenes de una huelga salpicada por la represión indiscriminada.
“Me golpearon en el brazo varias veces y en un costado”, explica Anita Botwin, atacada por la policía cuando hacía vídeo en vivo (streaming) en Cibeles. No fue un caso aislado, varios streamers fueron agredidos por la policía mientras retransmitían con su teléfono móvil y, de nuevo, las cámaras fueron blanco preferido de las fuerzas del orden en Madrid durante la jornada de huelga.
Desde primeras horas de la madrugada y hasta el día 15, la jornada de huelga general vio un goteo continuo de arrestos en las más de 140 protestas que se produjeron en el Estado y que dieron como balance 155 detenciones, según las últimas cifras del Ministerio de Interior, a las que se sumaron 25 detenciones durante la noche sólo en Madrid, y otras dos detenciones en Barcelona la siguiente mañana. En Madrid, los 56 detenidos de la jornada han sido acusados de daños, desórdenes públicos y atentado contra la autoridad.
La mayoría de los detenidos fueron liberados el mismo día o el día siguiente, en el caso de los detenidos durante la noche. Sin embargo, dos de ellos, uno de ellos miembro de la peña Bukaneros del Rayo Vallecano, siguen en prisión preventiva en Madrid, como un estudiante de 23 años en Granada. “No hay motivo para que el compañero espere el juicio en la cárcel, no hay riesgo de fuga, como corroboraron fiscal y juez, pero nos consta que ha habido presiones para saltarse una vez más sus propias leyes”, afirman desde Bukaneros. Esta detención dio pie a la delegada de Gobierno, Cristina Cifuentes, a acusar a la peña de ser responsable de los disturbios de la noche del 14 al 15 de noviembre.
Durante la noche, agentes de la Policía Nacional entraron y registraron el local de la peña, así como los domicilios de dos de sus miembros. “Nos ha tocado a Bukaneros ser la cabeza de turco por ser un grupo ultra rebelde que nunca se ha callado. La pancarta que sacamos tras el 25S nos convirtió automáticamente en enemigo público número uno”, dicen en referencia a la pancarta que mostraron a principios de octubre en un partido en el estadio de Vallecas en la que se podía leer “1.400 policías en el Congreso… y tu marido sigue fugado. Cifuentes dimisión”.
En Catalunya, la mañana después de la huelga general continuaron las detenciones. Dos personas de Nou Barris fueron arrestadas por su participación en un piquete cerca de El Corte Inglés. Uno de ellos fue Francisco Garrobo, candidato de Pirates de Catalunya. “Ya le llaman el asesino de la pegatina, porque la única imagen que se tomó de él fue pegando una”, afirma Josep Jover, de Pirates de Catalunya, quien explicó que tras la detención de Garrobo presentaron un habeas corpus –por detención ilegal– y fue liberado al día siguiente. Desde Pirates han anunciado que van a poner una denuncia y subrayan la “sobreprotección” de El Corte Inglés.
“Había cien policías y a cien metros, en la Dirección General de la Policía, se quemaron dos furgonetas porque no había nadie. O El Corte Inglés apoquina más que los otros, lo que sería un delito de prevaricación por parte de la Policía, o algo hay”, concluye Jover.
Balones fuera, balones dentro
“Hubo llamadas durante todo el día, muchas de ellas por agresiones”, explican desde la Comisión Legal Sol. Desde las 22.30 de la noche y hasta las 4h, cerca de 40 personas llamaron a esta comisión para preguntarles cómo proceder ante las agresiones que habían sufrido por parte de la policía. Aunque no hay cifras totales, al menos un centenar de personas resultaron heridas durante la jornada de huelga general. Por la red no han parado de circular imágenes de las agresiones sufridas por un miembro del bicipiquete de Cibeles.
Mientras, en Murcia, Carlos Gorairis, miembro de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), era pateado por la policía, que le rompió el tabique nasal y el pómulo izquierdo. A las primeras excusas por parte de la policía, que argumentaba que la carga se produjo porque los manifestantes habían tirado piedras y otros objetos y que Gorairis se lesionó al tropezar con una motocicleta, siguió el anuncio de una investigación después de que un vídeo sobre el suceso apareciera en la web de un medio de comunicación regional. Desde Stop Bales de Goma afirman que duran- te la carga se usó un disparador LL- 06, denominado técnicamente lanzagranadas, que Interior adquirió el pasado año y cuyo uso está muy extendido en Francia. ificada/439413.html]. “Puede haber una mala praxis policial”, admitió dos días después el jefe superior de Policía de Murcia, Cirilo Durán.
En Catalunya, la rectificación del Departament d’Interior no fue tan contundente. “No sólo por la situación producida con este menor en referencia al menor de 13 años agredido en Tarragona, sino por alguna actuación que, observando las imágenes, puede no adherirse estrictamente al protocolo de la carga por parte de algún agente. Ésta situación se habrá de justificar y sancionar si es el caso”, sostuvo Felip Puig, después de que los mossos afirmaran que las agresiones sufridas por el menor se produjeron por una mochila sobre la que rebotó accidentalmente la porra de uno de los agentes.
En el caso de Ester Quintana, una de las heridas más graves, que ha perdido la visión en un ojo tras recibir el impacto de una bala de goma, el conseller no ha dado su brazo a torcer. “No conozco el origen de la lesión, pero puedo asegurar que en ningún caso ha sido una pelota de goma”, afirmó tras asegurar que no hubo cargas policiales con salvas ni con ningún tipo de proyectil, a pesar de que hay varios vídeos de la jornada en los que se muestra lo contrario. Desde Stop Bales de Goma afirman que duran- te la carga se usó un disparador LL- 06, denominado técnicamente lanzagranadas, que Interior adquirió el pasado año y cuyo uso está muy extendido en Francia.
Stop balas de goma
Desde 1990 ya son 24 las personas que han perdido la visión en un ojo por el impacto de una bala de goma. Ester Quintana, herida en la jornada de huelga en Barcelona, es la última víctima de este tipo de armamento, que también provocó la muerte de un joven de 28 años en marzo tras un partido de fútbol.
Ter García
http://www.portaloaca.com/articulos/contra-info/6490-vuelve-el-estilo-lena-y-punto-el-14-n.html
Fuente: Ter García