El fabricante automovilístico alemán Volkswagen (VW) anunció ayer la eliminación de unos 20.000 puestos de trabajo y otras medidas destinadas a reducir costes y conseguir más rentabilidad de la marca estandarte del grupo. El anuncio de la mayor reestructuración en la historia de VW se produjo el mismo día en que el grupo hizo público que logró un 60,7% más de beneficio en el 2005.
«Los problemas de Volkswagen se deben combatir de forma consecuente y rápida para asegurar el futuro a largo plazo del consorcio», afirmó ayer el presidente del grupo, Bernd Pischetsrieder, que lanzó a continuación un mensaje de tranquilidad al personal : «El objetivo es asegurar la competitividad y los puestos de trabajo».
El número uno de VW agregó que «no se trata de poner en el primer plano el recorte de la plantilla ya que el objetivo es una reestructuración que contempla la reducción de los costes del factor trabajo». El plan incluye reestructuraciones en fábricas de componentes, un drástico recorte de los costes laborales y aprovechar al máximo las plantas de producción mediante un ajuste de su capacidad.
SANEAMIENTO
El ministro presidente del land de Baja Sajonia y miembro del consejo de vigilancia, el cristianodemócrata Christian Wulff, destacó que «sólo empresas saneadas pueden garantizar puestos de trabajo y competitividad». Wulff, que representa al segundo gran accionista de VW tras el grupo Porsche, admitió que el plan «puede ser materia de negociaciones».
Sin embargo, el máximo responsable de la marca VW, Wolfgang Bernhard, dijo a un periódico que «el consorcio se tiene que modernizar, como Alemania». «Los tiempos del sindicato IG Metal y de la política —añadió— quedarán en el pasado».
AHORRO DE GRUPO
Bernhard añadió que VW tiene que estar en condiciones de producir en Alemania coches como el Golf y anunció que moverá cielo y tierra «para encontrar potencial de ahorro». Según informaciones recogidas por la prensa germana, hasta el 2008 Volskwagen tendría que ahorrar costes por un mínimo de 7.000 millones de euros y, todo el consorcio, incluida Seat, Skoda y Audi, deben reducir los gastos en 10.000 millones.
Según varias informaciones, VW pretendería vender algunas fábricas de componentes que producen motores, cajas de cambios y ejes, lo que afectaría a miles de trabajadores de las factorías de Branunschweig, Salzgitter y Kassel en Alemania.
El grupo dejó claro que el recorte de plantilla afectará a la marca VW, que suma unos 100.000 empleados de los 344.000 del grupo. Por ello, las filiales Seat —que acaba de despedir a 660 empleados—, Audi y Skoda no resultarán afectadas.
Sin embargo, fuentes sindicales no descartaron que la reestructuración tenga algún efecto en Navarra. La planta de Landaben, en la que trabajan 4.100 personas, fabrica sólo el Polo, que también se ensambla en Eslovaquia, y en el 2005 sufrió una caída de producción del 9%. El bloqueo en la negociación del convenio colectivo sitúa a la fábrica en una situación «tremendamente peligrosa», según dijo el coordinador del sector de UGT, Antonio Ruiz Ocaña.
«Se necesita un acuerdo con urgencia para dar estabilidad a la fábrica y que el grupo no tenga la excusa de recortar plantilla», aseguró. A final de enero, UGT y CCOO lograron un ajustado apoyo de la plantilla a su propuesta de convenio frente a la alternativa de LAB y CGT.
El plan de VW se dio a conocer después de que la empresa informara del beneficio provisional del 2005, que ascendió a 1.120 millones de euros. Los beneficios operativos, descontados los efectos extraordinarios, subieron un 58,3% en el 2005, hasta los 2.792 millones.
Según Pischetsrieder, con esos datos, «la marca se sitúa sólo un poco por encima de la línea del cero» y destacó que la capacidad de exportación de las fábricas alemanas de VW «no ofrece garantía».
Fuente: EL PERIODICO | GONZALO CÁCERES / BERLÍN | ANTONI FUENTES / BARCELONA
