El alcalde, Javier León de la Riva, dictará un acuerdo por el que se multará a los colectivos y bares que instalaron ayer sus barras (una veintena) en la fiesta de San Juan en Las Moreras, ante la prohibición recogida en los reglamentos reguladores sobre la venta fuera de establecimientos comerciales y también por el despacho de alcohol en la vía pública. Las sanciones, según ambas normativas municipales, pueden alcanzar los 90 euros en el primer caso y los 12.000 en el segundo.
A las 11.20 horas, la Policía Municipal levantó acta de la instalación de varias « barras de expedición de bebidas en lugar público », según reza el informe, en la playa. « Nos tomaron los datos », comentaron los responsables de algunos de estos puestos, que vivieron el resto de la tarde y noche con « tranquilidad y ganas de pasarlo bien », como explicaba Yolanda Rodríguez, de la Asamblea Ciudadana de Valladolid. El Ayuntamiento les advirtió el martes, a través de un dictamen de la concejalía de Medio Ambiente, de que no les estaba permitida « la instalación de barras en la zona de la chopera », aunque sí el montaje de un escenario y contenedores de basura.
Presentación del recurso
Los organizadores de la fiesta -la Asociación ciudadana contra el fascismo y la represión- presentaron ayer un recurso en el juzgado de lo contencioso administrativo por entender que esta prohibición estaba fuera de lugar, « sabían desde hace un mes nuestra intención de hacer la fiesta y fue el día antes cuando nos impidieron montar mostradores », explican. Los colectivos y bares relacionados con la fiesta (entre otras, CNT, Fundación triángulo, Izquierda Castellana o CGT) tuvieron una reunión el martes y acordaron instalar las barras.
Durante el transcurso de la multitudinaria celebración de San Juan -la playa de Las Moreras parecía ayer Benidorm en mes punta- leyeron un comunicado en el que aseguraban que « un año más, este Ayuntamiento dirigido por el señor León de la Riva ha puesto todas las pegas posibles para impedir la noche de San Juan en las Moreras, pero un año más lo hemos conseguido, y van cuatro ». El Ayuntamiento ha argumentado su decisión para no autorizar la instalación de barras por considerar que « en la misma zona hay un chiringuito y bar a quien se podría hacer competencia » y que los inspectores municipales que velan por las garantías sanitarias y de consumo solo podían supervisar los festejos de la Feria.
Dos funcionarios
« Ni la función de control de la mañana ni la inspección de la tarde y noche se puede realizar en otras zonas, ya que el personal de inspección para esa noche es de dos funcionarios », recoge el informe municipal, que añade que « desde hace más de veinte años se viene, sistemáticamente, denegando desde este servicio, y en coordinación con la Junta, cualquier actividad que no esté programada en tiempo y que no pueda ser inspeccionada ». Este informe municipal está fechado a viernes 18 de junio y el concejal de Medio Ambiente, José Carlos Muñoz, le dio validez el lunes. A partir de aquí, el alcalde tiene potestad para imponer las sanciones que recogen los reglamentos.
Miles de personas, sobre todo jóvenes (mucha bolsa con bebidas de supermercado) abarrotaron la playa y la chopera desde horas antes del encendido de la hoguera -en realidad hubo muchas y pequeñas ardiendo desde las 23.00 horas- y apoyaron actuaciones infantiles como las de El Duende Eléctrico o un curso infantil de percusión. Más entrada la noche, abarrotaron los conciertos de pinchadiscos y grupos locales como Sed, Rumbeuros, Joti, Milongo Selektah o los segovianos Korrosiva. Hubo espacio también para una representación de música y pintura a cargo de El pintor chiflado.