UGT denuncia que la víctima se hallaba “encima de un elevador que debe usarse sólo para mercancías y podría estar en mal estado”
Aplastado por un montacargas. Así fue la muerte de un trabajador de 50 años, ayer, en un edificio en obras de Valencia. Según denuncia UGT, la víctima estaba en un elevador que únicamente se debe utilizar para trasladar mercancías. Además, esta máquina “podría estar en mal estado”, añadieron fuentes sindicales.
UGT denuncia que la víctima se hallaba “encima de un elevador que debe usarse sólo para mercancías y podría estar en mal estado”

Aplastado por un montacargas. Así fue la muerte de un trabajador de 50 años, ayer, en un edificio en obras de Valencia. Según denuncia UGT, la víctima estaba en un elevador que únicamente se debe utilizar para trasladar mercancías. Además, esta máquina “podría estar en mal estado”, añadieron fuentes sindicales.

La vida de un inmigrante armenio acabó ayer lejos de su país de origen y de una manera trágica : el hombre falleció a los 50 años, aplastado por un montacargas. De acuerdo con la versión ofrecida por los bomberos, el elevador, colocado en la fachada del edificio, atrapó al obrero, que estaba en un piso inferior, contra el forjado de la obra.

Pero según los datos de los que dispone UGT, la víctima estaba en el montacargas y su brazo quedó enganchado entre la máquina y el forjado. “Este tipo de elevadores son únicamente para transportar material y en ningún caso pueden acceder personas, por lo que hay que establecer las causas por las que el trabajador estaba en la plataforma”, denunciaron desde la Federación de Metal, Madera y Construcción.

El sindicato también se cuestiona “si el obrero sabía que no podía acceder al montacargas o si cumplía la orden directa de un superior”. Pero no sólo eso. Según ha podido saber UGT, “el montacargas podría estar en mal estado, por lo que la obra no cumplía con las medidas de seguridad pertinentes”.

Lo cierto es que el accidente llenó de angustia a los compañeros y responsables de la construcción, situada en el número tres de la calle Faura, en el barrio de Benicalap. El reloj marcaba las 8.45 horas cuando se sucedieron las llamadas a la policía. Al lugar acudieron miembros de la Policía Nacional, Policía Local y Servicio Municipal de Bomberos.

El rescate no fue fácil. La víctima quedó enganchada por la cabeza, en una dantesca posición que quitaba el aliento y complicaba el rescate. De hecho, los bomberos tuvieron que emplear una sierra radial para cortar la estructura metálica que atenazaba su cuerpo. Después lo colocaron en una tabla de rescate y lo bajaron a la calle mediante un brazo articulado, ante la mirada desolada de sus compañeros.

Inmigrantes y jóvenes

UGT denunció que los inmigrantes son, junto con los jóvenes, los colectivos que más accidentes laborales sufren. Respecto a los ciudadanos extranjeros, el sindicato considera que siniestros como el de ayer demuestran “la escasez de planes de formación para este sector y la alta precariedad laboral que les afecta”.

“La mayoría de los accidentes en la construcción podrían evitarse si se cumplieran las medidas de seguridad y los planes de prevención”, concluyen las fuentes de UGT.


Fuente: J. A. MARRAHÍ/lasprovincias