Ricardo Regades Romero, un empleado de 56 años de la fábrica de Clesa en Caldas, pereció ayer en un accidente laboral. El siniestro ocurrió a primera hora de la mañana en la planta ubicada en la parroquia de Saiar cuando el trabajador tomaba muestras de leche subido a un camión cisterna.

Ricardo Regades Romero, un empleado de 56 años de la fábrica de Clesa en Caldas, pereció ayer en un accidente laboral. El siniestro ocurrió a primera hora de la mañana en la planta ubicada en la parroquia de Saiar cuando el trabajador tomaba muestras de leche subido a un camión cisterna.

Fuentes policiales indicaron que la víctima perdió el equilibrio o resbaló, precipitándose al suelo desde una altura de varios metros y golpeándose fuertemente en la parte posterior de la cabeza. Hasta el lugar se desplazó una ambulancia del 061 y el médico de la zona, además de un helicóptero, que no llegó a aterrizar. Las asistencias no pudieron hacer nada para salvar su vida.

Ricardo Regades Romero nació en Vilagarcía, aunque residía en el lugar de Follente, en la parroquia caldense de Bemil. Desde hace muchos años trabajaba en la zona de descargas de leche de la factoría.