La Policía cree que la muerte de dos personas por arma de fuego, que se produjo a primera hora de esta mañana en Pamplona, podría tratarse de un caso de violencia de género, aunque todas las hipótesis están abiertas, puesto que los fallecidos no han sido identificados, según los responsables de la investigación.

La Policía cree que la muerte de dos personas por arma de fuego, que se produjo a primera hora de esta mañana en Pamplona, podría tratarse de un caso de violencia de género, aunque todas las hipótesis están abiertas, puesto que los fallecidos no han sido identificados, según los responsables de la investigación.

Una joven ha sido asesinada esta mañana cuando se encontraba en el interior de su vehículo en el barrio de San Juan (Pamplona) al recibir varios disparos de escopeta realizados por un hombre desde la calle. El agresor, compañero sentimental de la víctima, se ha suicidado después con la misma escopeta.

Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 07.45 horas frente al número 2 de la calle Marqués de Vadoluengo, en el barrio pamplonés de San Juan.

La chica, vecina de la calle, fue asesinada cuando se disponía a ponerse en marcha con su vehículo, un Peugeot 206 de color negro. El hombre, al parecer también joven y de Pamplona, le disparó desde la calle varias veces con una escopeta de caza antes de suicidarse con la misma arma, según las primeras hipótesis de los investigadores, agentes de la policía foral y del Cuerpo Nacional de Policía. Éste se ha hecho cargo de la investigación y todavía no ha facilitado las identidades de los fallecidos.

El Gobierno de Navarra ha convocado a las instituciones y a la ciudadanía a una concentración en repulsa por el asesinato de la joven. El acto tendrá lugar a las 12.30 horas en la Plaza del Vínculo, junto a la sede del Instituto Navarro de la Mujer.

No había constancia de denuncias de amenazas

Los padres de la joven fallecida son conocidos en el barrio de San Juan, donde residen desde hace años, por lo que la noticia ha sido acogida por los vecinos con «incredulidad y consternación».

El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, ha asegurado que «al parecer existía una relación sentimental o había existido, aunque no hay constancia de que hubiera una denuncia o medida judicial adoptada que pudiera llevarnos a presumir este fatal desenlace».