Imagen : CRISTIAN EDUARDO. EL REPRESENTANTE DE ZANON VISITÓ LEVANTE-EMV.
Cerámicas Zanon de Neuquén, en el norte de Argentina, es una de las 180 fábricas recuperadas por sus propios trabajadores tras la crisis económica que azotó al país durante la década de los 90. Tras cuatro años de autogestión, y salvado el cierre de la fábrica, los despidos, indemnizaciones e impagos, hoy produce 320.000 m2 de azulejos mensuales y da empleo a 450 trabajadores.
Imagen : CRISTIAN EDUARDO. EL REPRESENTANTE DE ZANON VISITÓ LEVANTE-EMV.
Cerámicas Zanon de Neuquén, en el norte de Argentina, es una de las 180 fábricas recuperadas por sus propios trabajadores tras la crisis económica que azotó al país durante la década de los 90. Tras cuatro años de autogestión, y salvado el cierre de la fábrica, los despidos, indemnizaciones e impagos, hoy produce 320.000 m2 de azulejos mensuales y da empleo a 450 trabajadores.
La historia reciente de Argentina está marcada por la movilización social y la inmigración cuasi forzosa de miles de argentinos tras la crisis económica del país, que se tejió en la década de los 90 con el gobierno de Menem, pero que explotó para el mundo entero al son de « caceroladas » a finales del año 2002. Sin embargo, ante la debacle que a finales de los 90 cerraba fábricas y empresas de todos los sectores, otros miles de argentinos decidieron organizarse para recuperarlas. Uno de los casos paradigmáticos lo fue el de la fábrica de cerámica Zanon en Neuquen, una de las regiones más pobres del país.
A lo largo de estos últimos años, los trabajadores en Argentina han conseguido recuperar en torno a 180 empresas y fábricas, así como más de 10.000 puestos de trabajo. Cristian Eduardo, un representante de Cerámicas Zanon, visitó la pasada semana las instalaciones de Levante-EMV y contó cómo la fábrica se ha abierto a la comunidad de Neuquen, y cómo los trabajadores han resistido durante los últimos cuatro años 6 intentos de desalojo.
Cristian Eduardo, que visita Europa para apoyar la campaña de la Confederación General de Trabajadores « Un autobús para Zanon », y dar a conocer cómo se autogestiona esta fábrica recuperada, advierte que incluso en el ámbito del movimiento de empresas y fábricas recuperadas en Argentina existen diferentes visiones respecto a la metodología y objetivos, que han dado lugar a dos movimientos de recuperación principales, el de las fábricas (Caro) y el de las empresas (Murua). Pero Zanon se desmarca de ellos. « La estrategia en Zanon fue recuperar primero y sigilosamente el cuerpo de delegados sindicales continuamente represaliado, a través de una metodología asamblearia, que acordó que no se negociaran ni despidos, ni indemnizaciones. Nuestro cuerpo de delegados se alió con otros, con la comunidad mapuche, con los piqueteros, con los docentes… Lo hacíamos por el trabajo y por la fábrica », comenta Cristian Eduardo, que indica que a principios de 1999 dejó de cobrar sus nóminas.
Los trabajadores llevaron el caso ante los tribunales, y la jueza emitió un fallo que obligó al dueño a retomar la actividad, dado que éste no demostró la crisis y no aparecieron los libros de cuentas, así como a reponer los servicios de transporte y sanitarios, además del embargo de material para el pago de sueldos atrasados.
Tras un intenso debate entre los trabajadores, el colectivo determinó que no podía esperar a la vuelta del empresario. « Ya habíamos esperado muchos meses, y habíamos sufrido demasiado, así que nos pusimos a producir. Empezamos a producir 20.000 m2 de azulejo al mes y ahora hacemos 320.000, aunque la fábrica podría alcanzar el millón. Mantenemos la igualdad salarial para todos los sectores, funcionamos de forma asamblearia a través de coordinadores de área y hemos resistido 6 intentos de desalojo », concluye.
Nuria Tendeiro Parrilla, Valencia
LEVANTE-EMV
