Málaga, 08 de agosto. Durante la tarde de ayer, la policía nacional cargó contra un centenar de participantes de la Asamblea del Movimiento 15-M en Málaga, trasladada de su habitual punto de celebración, la Plaza de la Constitución, a la puerta del Centro de Internamiento para Extranjeros (CIE). Los ciudadanos se solidarizaban en ese momento con Sid Hamed Bouziane, que está a punto de ser deportado, pese a encontrarse a la espera de recibir asilo político ante la situación en su país, Argelia, donde está amenazado de muerte.

La Asamblea General de Málaga se había reunido, como cada domingo, a las 20.00 horas en la Plaza de la Constitución y trató como primer punto de urgencia en el orden del día la situación de Bouziane. Su compañera sentimental y amigos de Córdoba solicitaban al Movimiento 15-M en Málaga todo el apoyo para retrasar su deportación, mientras se le concede el asilo político. La Asamblea consensuó trasladar el debate de ese día a la puerta del CIE de Málaga situado en la Plaza de Capuchinos.

La Asamblea General de Málaga se había reunido, como cada domingo, a las 20.00 horas en la Plaza de la Constitución y trató como primer punto de urgencia en el orden del día la situación de Bouziane. Su compañera sentimental y amigos de Córdoba solicitaban al Movimiento 15-M en Málaga todo el apoyo para retrasar su deportación, mientras se le concede el asilo político. La Asamblea consensuó trasladar el debate de ese día a la puerta del CIE de Málaga situado en la Plaza de Capuchinos.

Durante la segunda parte de la Asamblea frente a la puerta del CIE han ido llegando furgonetas de la policía con decenas de agentes. Los ciudadanos y ciudadanas que participaban en la Asamblea han seguido con esta de forma pacífica, mientras la policía nacional recibía refuerzos, esta vez de los antidisturbios, equipados con guantes, cascos y escudos. Primero los agentes intentaban detener a un abogado miembro de la Comisión de Legal, intermediario entre estos y la Asamblea, para después identificar a los asistentes a la Asamblea.

Más tarde, los agentes han desplegado un cordón policial alrededor de la Plaza de Capuchinos, identificando también a los compañeros que venían a apoyar a la Asamblea. Sobre las 00.40 horas, uno de los agentes ha interrumpido la Asamblea, subrayando que esta no se podía eternizar y que debería continuar en la Plaza, amenazando sino con desalojar.

La Asamblea ha proseguido de forma pacífica hasta que los agentes han comenzado a levantar uno por uno a los asistentes, que han ofrecido resistencia pasiva. A pesar de ello, los antidisturbios se han extralimitado durante el desalojo, abusando de su fuerza y golpeando, pateando y empujando a los ciudadanos por las escaleras, dejando al menos seis heridos de diversa consideración y numerosos contusionados. Los efectivos sanitarios han tenido que trasladar a una persona que había quedado inconsciente en ambulancia al hospital y el resto de los heridos ha precisado atención médica especializada.

Durante el desalojo, los ciudadanos han lanzado las consignas pacíficas que identifican al Movimiento y han resistido siempre de forma no violenta ante la demostración de fuerza ejercida por la policía. Tras la carga policial, se han reagrupado y han continuado la Asamblea en la que han decidido permanecer acampados en la Plaza de Capuchinos y mantener la vigilancia sobre el CIE para evitar que se efectúe la deportación de Bouzaine.


Fuente: Movimiento del 15 de mayo. Plaza de la Constitución de Málaga