Un centenar de personas han formado una cadena humana el miércoles 12 de diciembre alrededor del edificio del Hospital Joan XXIII de Tarragona, en una acción de protesta contra los recortes sociales y laborales, organizada por CGT, COBAS y la Asamblea del 15M, en coordinación con otros centros de Cataluña.
Después de una concentración ante el hospital, que ha obligado a cortar el tráfico durante unos minutos, los trabajadores del centro se han ido tomando de las manos hasta formar la cadena, que se ha mantenido, simbólicamente, durante poco más de un minuto, y acto seguido se ha disuelto. Ferran Aiximeno, secretario de la junta de personal del Hospital, lamentó que la reapertura de salas de operaciones es por «maquillar» números al final de año, pero que no se garantiza la continuidad.
Después de una concentración ante el hospital, que ha obligado a cortar el tráfico durante unos minutos, los trabajadores del centro se han ido tomando de las manos hasta formar la cadena, que se ha mantenido, simbólicamente, durante poco más de un minuto, y acto seguido se ha disuelto. Ferran Aiximeno, secretario de la junta de personal del Hospital, lamentó que la reapertura de salas de operaciones es por «maquillar» números al final de año, pero que no se garantiza la continuidad.
«A partir de octubre se han incrementado los quirófanos y se han abierto casi todas las camas, pero esto, a parte de ser gasto extra, no es correcto si sólo es una medida hasta el 1 de enero y cuando se prevé que el próximo año volverán a haber recortes del 15% o 20% », advirtió Aiximeno. «Desde el 2011 hemos perdido casi 200 trabajadores, y ahora al final de año hay 68 más que se les acaba el contrato y no sabemos qué pasará con ellos», lamentó.
Durante la acción en el Hospital Joan XXIII, hecha en un ambiente festivo, también ha intervenido la presidenta de la Junta de Personal de la Atención Primaria en Tarragona, Gemma Ortega, que ha lamentado la situación de cierre de ambulatorios y el incremento de las listas de espera. «Ya hace casi un año que protestamos en viernes, que bautizamos como» viernes negro «, pero con el tiempo pierde el eco y hay que hacer oír nuestra voz», ha concluido Ortega.
Fuente: delCamp.cat
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