Hoy es 8 de marzo y me he acordado de ti, Pilar. ¿Hace tan poco que estabas con nosotras en la calle, en los encuentros, andando juntas el camino ? Me gustaría haberme despedido de ti con una larga conversación ; me gustaría haberme despedido con palabras, con esas palabras con las que nos enseñabas sobre otras mujeres que, como tú, vivieron el anarcofeminismo. Quizá me dirías ahora : ¡qué va ! Si yo no soy tan importante. Pero sí, por más que te cansaras a decirlo, lo eras. Eras importante para tus compañeras, que aprendimos de ti y contigo, y eras importante para nuestra memoria y la de tantas mujeres que rescataste del olvido o de la indeferencia.

Hoy es 8 de marzo y me he acordado de ti, Pilar. ¿Hace tan poco que estabas con nosotras en la calle, en los encuentros, andando juntas el camino ? Me gustaría haberme despedido de ti con una larga conversación ; me gustaría haberme despedido con palabras, con esas palabras con las que nos enseñabas sobre otras mujeres que, como tú, vivieron el anarcofeminismo. Quizá me dirías ahora : ¡qué va ! Si yo no soy tan importante. Pero sí, por más que te cansaras a decirlo, lo eras. Eras importante para tus compañeras, que aprendimos de ti y contigo, y eras importante para nuestra memoria y la de tantas mujeres que rescataste del olvido o de la indeferencia.

Te vamos a echar de menos, tu partida definitiva ha sido un duro golpe para todas porque “tu despedida fue decir adiós con un hondo silencio” . Ahora nos toca rescatar tus palabras y echarlas a volar para que a nadie se le olvide las grandes historias “chiquitas” que tú trajiste a la Memoria y a la Historia (con mayúsculas).

Tú contribuiste a hacer mejor este mundo y por eso no te vamos a dejar marchar ; te hemos guardado un sitio en nuestros corazones y en nuestra memoria. No te olvidaremos, compañera.

Azucena Muñoz Francisco

Secretaria de la Mujer
CGT-CyL

secretariamujer t6u wanadoo.es


Pilar Molina Beneyto fue una investigadora e incansable luchadora feminista libertaria que creía firmemente –y estaba en lo cierto- que, con su trabajo, contribuía a una sociedad mejor, y estas pobres palabras que le dedico sólo pretenden mostrar mi respeto y mi cariño hacia ella y no permitir que se la olvide, como pasó con otras muchas mujeres. Otras libertarias que ella no nos dejó olvidar.