El pasado viernes día 3 de Diciembre, y durante una hora, los representantes del grupo “Recuperando la Memoria de la Historia Social de Andalucía” de CGT - A, trasladaron a la Comisión Interministerial sus experiencias -acumuladas durante los últimos cinco años- y sus deseos de seguir trabajando en esta área, que está significando todo un desafío a los poderes fácticos del posfranquismo (todo atado y bien atado) de y a la vez una profundización en la democracia, que hasta ahora había preferido “mirar para otro lado” cuando se ponían sobre la mesa estos temas.
En la comparecencia ante la Comisión Interministerial para la Recuperación de la Memoria, la CGT -A pide que «al menos, nos dejen seguir trabajando».
El pasado viernes día 3 de Diciembre, y durante una hora, los representantes del grupo “Recuperando la Memoria de la Historia Social de Andalucía” de CGT – A, trasladaron a la Comisión Interministerial sus experiencias -acumuladas durante los últimos cinco años- y sus deseos de seguir trabajando en esta área, que está significando todo un desafío a los poderes fácticos del posfranquismo (todo atado y bien atado) de y a la vez una profundización en la democracia, que hasta ahora había preferido “mirar para otro lado” cuando se ponían sobre la mesa estos temas.
El grupo hizo especial hincapié en que estas iniciativas se vienen realizando desde la concepción de generar procesos colectivos, participativos, que representen en sí mismo un ejercicio de reconocimiento público de los valores que representa, lo que suponen un valor añadido al conocimiento renovado de nuestra historia reciente al incorporar la memoria, a través de la historia oral e historias de vida de sus protagonistas (no sólo interesa qué pasó, sino cómo se vivieron estos hechos por la sociedad en general), y otras son temáticas que se deben de ir poniendo en marcha por parte de las Administraciones como un servicio público más que es demandado por un número importante de ciudadanos/as desde hace muchos años.
En el desarrollo de la comparecencia se informó de las actuaciones, en varios frentes, para la recuperación de : 1º personajes con un importante protagonismo en aquella época pero excluidos -por sus ideas- de la historia : el Dr. Pedro Vallina, reeditando para ello sus memorias (CAL&Libre Pensamiento 1999), y para el próximo enero la biografía y obras de José Sánchez Rosa, pedagogo ejecutado en Agosto del 36 en Sevilla con 70 años (Trevis&Libre Pensamiento) ; 2º documentos de la historia del anarcosindicalismo, como “el convenio de la construcción de Sevilla de 1936” en el que se firmó una jornada laboral de 36 horas y otros aspectos novedosos de actualidad (CAL&Libre Pensamiento 2001).
Estas iniciativas se han presentado -mediante proyectos concretos y cuantificados- a instituciones andaluzas, que no siempre ha estado a la altura de las circunstancias. Se hizo especial hincapié en la reivindicación de “salvar aquellos testimonios valiosos para las futuras generaciones”, y en este sentido fue la necesidad de dar los pasos necesarios pa constituir, El Banco Audiovisual para la Memoria Social de Andalucía (BAMSA), que podría ser asumida y puesta en marcha por el Gobierno de España a través de la empresa RTVE y de convenios de colaboración con las organizaciones que venimos trabajando en esta materia. Todo ello con el objetivo de : 1º Recoger testimonios de “los protagonistas” de la guerra, posguerra, exilio y transición. 2º Recuperar imágenes históricas de TVs. de otros países sobre este periodo. 3º Constituir el banco audiovisual que, administrado por la Filmoteca Nacional o similar, lo haga accesible a todas las personas interesadas (historiadores, investigadores, centros de enseñanza, medios de comunicación, etc…), mediante su adecuada gestión pública.
Asimismo y después de tres años de investigaciones le manifestamos, con rotundidad, que la represión política especializada (Esclavos del franquismo), ha sido no solo olvidada sino también marginada en los tres procesos de indemnizaciones que han realizado en Gobierno Central y los de las diferentes CCAA al no reconocer esta figura, e incluso dejar fuera de ellos la “redención de penas” fuera del cómputo de las indemnizaciones, pero también de reconocimiento por parte de aquellos (entes y empresas) beneficiadas por dicho trabajo-esclavo. Por ello, le propusimos al Gobierno de España que : 1º Reconocimiento oficial de la figura del “preso político esclavo del franquismo”, por parte del Estado. 2º Petición de resarcimiento (económico y/o dignificación pública) por parte de los entes/empresas beneficiadas por los trabajos realizados. 3º Realización de un estudio de investigación y publicación posterior de los trabajos realizados por estas personas, así como de su cuantificación económica, y 4º Construcción de un Memorial-Centro de Interpretación en “Los Merinales” (Dos Hermanas-Sevilla), donde ubicar la documentación, entrevistas audiovisuales y donaciones de los ex-presos y familiares, así como que sirva de “lugar de memoria” y referencia donde realizar actividades de encuentro y divulgación de esta temática.
También comentamos la necesidad de responder a las familias que aún seguían pidiendo información sobre sus desaparecidos y para ello le propusimos el proyecto “Todos los nombres”. Construcción de una base de datos de represaliados, desaparecidos, exiliados, etc.. para su consulta por internet, a partir de la elaboración de una página Web, todo ello contando con la participación activa de los investigadores, historiadores y organizaciones sociales que venimos trabajando para este fin.
Estrechamente vinculado al punto anterior se encuentran -con especiasles problemátivas- los descendientes del Exilio. Pese a que es una faceta bastante conocida, aún existen importantes trabas administrativas que impiden la concesión de la nacionalidad española a descendientes de los exiliados.
Asimismo, el grupo recomendó a la Comisión Interministerial el inicio de estudios jurídicos para que se comience a planificar, desde el Estado, la cuantificación y posterior devolución de los patrimonios familiares expoliados, incautados, robados y/o expropiados a miles de familias, entidades y organizaciones sociales, desde el inicio del golpe militar y, sobre todo, durante los primeros años de la posguerra.
La intervención terminó con un llamamiento al Gobierno de España “que nos dejen seguir trabajando, o al menos que se nos pongan tantas dificultades”. Su respuesta fue de felicitación por la documentación entregada así como su extrañeza a no plantearle reivindicaciones de carácter económico y/o jurídico de muy difícil resolución. ¿… ?
Cecilio Gordillo
Coordinador.
Par : CECILIO GORDILLO