Desde hace ya varios meses, en esta y otras universidades de la Comunidad de Madrid y otras partes del Estado, se han sucedido encierros de trabajo, debates, charlas, manifestaciones y demás signos de la oposición del estudiantado al proceso de Bolonia.
Uno de los aspectos fundamentales que siempre hemos denunciado son la desinformación y falta de debate que ha acompañado a una reforma tan importante, que va a suponer una profunda transformación de la universidad pública tal y como la conocemos hoy en día. Nuestro objetivo no era otro que introducir en el espacio público dicho debate, para así lograr que nuestras instituciones escuchasen la voz de todas y todos los estudiantes, quienes creemos que en esto tenemos mucho que decir.
Nuestra oposición a las reformas que se pretenden imponer a partir de la Declaración de Bolonia y mediante la aprobación de la LOU, en el marco del Espacio Europeo de Educación Superior, se debe a que consideramos que las mismas van en detrimento de la función que debe cumplir la universidad pública como centro de transmisión del conocimiento y son un paso clave en el proceso de mercantilización de la educación superior. Esta reforma, disfrazada por sus defensores de “progresista” o “participativa”, supone la adaptación de la universidad pública a los intereses del mercado y por lo tanto, de la empresa privada.
Las consecuencias de este proceso las estamos sufriendo los y las estudiantes de forma directa, que vemos como se aprueban los grados que sustituirán a las actuales licenciaturas, en muchos de los cuales el último año será de prácticas no remuneradas ; nos suben las tasas, el precio del crédito de los másters o posgrados, duplica el del crédito de la licenciatura ; se introducen las becas-préstamo, etc. Y encima, recientemente nos encontramos con el anuncio del recorte presupuestario que la Comunidad de Madrid ha impuesto a las universidades públicas. Lejos de tratarse de una medida independiente de esta reforma, propia únicamente de las ansias privatizadoras del PP, ésta encuadra perfectamente con la filosofía de Bolonia, que también pasa por este ataque a lo público.
Estamos en un año clave, nos encontramos ante el último curso de implantación del proceso de Bolonia. Pero este curso, el movimiento estudiantil también ha empezado más fuerte que nunca, los rectores han empezado a pedir ayuda al Gobierno porque consideran que este movimiento va a seguir creciendo y tienen razón, porque somos cada vez más fuertes. Esto demuestra que aún estamos a tiempo, que Bolonia todavía se puede parar.
Nos encerramos porque nos oponemos a este proceso de mercantilización de la educación y ésta parece ser la única forma de hacer que se nos escuche..Y nos encerramos también para seguir construyendo el movimiento y abrir ese espacio de debate que nos niegan las instituciones. Y no estamos sol@s, miles de estudiantes están también encerrados en otras universidades de Barcelona, Sevilla, Valencia, Cuenca, etc. Consideramos que en el momento actual, no se puede ignorar el proceso de Bolonia : sólo cabe defenderlo abiertamente o sumarse a la resistencia contra el mismo.
Tráete tu saco y únete a la lucha por una universidad pública, gratuita y popular !!
¡NO A BOLONIA, NO A LA LOU !
http://www.encierrosomosaguas.tk/
Fuente: Asamblea de estudiantes de Ciencias Políticas, Sociología y Trabajo Social