chiclana. Tras la reunión celebrada el pasado martes por la mañana en las oficinas del Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación (CMAC), trabajadores, empresa y Ayuntamiento siguen a la espera de que Empleo dictamine si finalmente se establecen servicios mínimos de limpieza viaria durante las jornadas de huelga que los sindicatos han convocado para la Feria de San Antonio y en la que también participarán los operarios de mantenimiento de jardines.
Tal posibilidad, que ha sido reiteradamente rechazada por los trabajadores, podría servir, según señaló ayer a este medio la Confederación General de Trabajo (CGT), «para encender definitivamente una mecha que los sindicatos estamos intentando mantener apagada».
«Es evidente», señaló Francisco Mena, representante sindical, «que la actual normativa no contempla en modo alguno el establecimiento de servicios mínimos para el servicio de limpieza viaria y, consecuentemente, de dictaminarse la puesta en marcha de los mismos estaríamos ante una resolución que no se ajustaría a la legalidad». «Es más», destacó el portavoz de la Confederación General de Trabajo, «el político que se atreva a dar un paso en este sentido y establezca dichos refuerzos mínimos estará incurriendo en un delito de prevaricación, algo que», añadió, «confiamos que no se produzca».
Asimismo, Francisco Mena mostró su sorpresa porque, «conocida la actual legislación, no se entiende que se convoque al comité de huelga y a la empresa en el Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación para pactar unos servicios mínimos que sólo son planteables», insistió, «desde un prisma político poco democrático y que podría responder a un comportamiento de prevaricación».
«No obstante», concluyó, «si finalmente se establecen dichos servicios, plantearemos el consiguiente recurso».
Asimismo, representantes de los trabajadores recuerdan que hace unas fechas también fueron a la huelga los operarios del servicio de limpieza viaria de El Puerto de Santa María, no llegándose a establecer los refuerzos mínimos durante las jornadas de protesta.
Fuente: lourdes de vicente/
