Ayer por la mañana se nos encogía el corazón tras conocer la noticia del fallecimiento de un compañero en Navantia San Fernando (Cádiz), víctima de un accidente laboral tras la inhalación de gases tóxicos y tras el fallo del medidor de humos.
El Terrorismo Patronal suma una nueva víctima, esta vez de tan solo 39 años, a la ya demasiado larga lista de fallecidos en los centros de trabajo.
En esta ocasión una mayor inversión en medidas de protección y de medición, hubiera supuesto con casi toda seguridad, el no tener que estar escribiendo estas líneas, ya que el trágico suceso se podría haber evitado.
El Terrorismo Patronal suma una nueva víctima, esta vez de tan solo 39 años, a la ya demasiado larga lista de fallecidos en los centros de trabajo.
En esta ocasión una mayor inversión en medidas de protección y de medición, hubiera supuesto con casi toda seguridad, el no tener que estar escribiendo estas líneas, ya que el trágico suceso se podría haber evitado.
Ante esta lamentable noticia, la plantilla al completo de Navantia San Fernando y Puerto Real, paralizo su producción de inmediato en señal de protesta y en memoria del compañero fallecido; concentrándose a las puertas del centro de trabajo y denunciando los peligros y las situaciones diarias que viven en Navantia.
Lo más repúgnate de todo lo sucedido en estas últimas horas ha sido el comportamiento del Comité de Empresa de Navantia Cádiz al completo (UGT, CCOO y CAT), negándose a sumarse a la concentración que toda la plantilla ha realizado hoy a las puertas de su centro de trabajo, junto con Confluencia Sindical (CGT, AO, USTEA, CPM, CNT, SAT y CTA), paralizando la producción de esta planta en señal de protesta y en memoria del compañero.
Esta actitud no muestra otra cosa que el pasotismo y la dejadez que este comité tiene ante un hecho tan grave como el fallecimiento de un compañero en un accidente de trabajo; se demuestra así la complicidad de este Comité con la empresa y el miedo que tiene de que salga a la luz su nulo trabajo en prevención de riesgos laborales.
Desde CGT, y más concretamente desde la Federación del Metal, denunciamos estos hechos, exigiendo a la empresa unas inversiones en seguridad que permitan a toda la plantilla el acudir a sus puestos de trabajo sin el temor de pensar quién será el siguiente.
Del mismo modo, desde CGT mandamos nuestro más sincero apoyo tanto a los familiares como a las compañeras y compañeros del trabajador fallecido, poniéndonos a su disposición para cualquier tipo de asesoramiento o ayuda.
CGT-FESIM
Fuente: CGT-FESIM