El fallecido, que responde a las iniciales F.G.M., tenía 47 años y era natural de Plasencia, a donde fue trasladado en la tarde de ayer para ser enterrado hoy
La tragedia llegó ayer al mundo laboral en la capital abulense. Un hombre de 47 años, natural de Plasencia, casado y con hijos, falleció al caerle encima un talud de tierra cuando se encontraba trabajando en una obra en la zona sur de la ciudad. El desplome de tierra sepultó al trabajador, que murió aplastado. Los intentos de reanimación de sus compañeros de obra primero y de los médicos después fueron inútiles. En la tarde de ayer fue trasladado a su localidad natal, donde hoy será enterrado. Se da la circunstancia de que uno de los hijos del fallecido trabajaba también en la construcción, en la misma empresa.
El fallecido, que responde a las iniciales F.G.M., tenía 47 años y era natural de Plasencia, a donde fue trasladado en la tarde de ayer para ser enterrado hoy

La tragedia llegó ayer al mundo laboral en la capital abulense. Un hombre de 47 años, natural de Plasencia, casado y con hijos, falleció al caerle encima un talud de tierra cuando se encontraba trabajando en una obra en la zona sur de la ciudad. El desplome de tierra sepultó al trabajador, que murió aplastado. Los intentos de reanimación de sus compañeros de obra primero y de los médicos después fueron inútiles. En la tarde de ayer fue trasladado a su localidad natal, donde hoy será enterrado. Se da la circunstancia de que uno de los hijos del fallecido trabajaba también en la construcción, en la misma empresa.

A las 11,17 horas el servicio de emergencias 112 de Castilla y León recibía el aviso de que en una obra de la zona sur de la capital se había producido un derrumbe de tierra que había enterrado a un obrero. Inmediatamente se desplazaron hasta el lugar del accidente una UVI móvil del Sacyl, un camión de bomberos y varios efectivos de la policía local y nacional. Al llegar los sanitarios se encontraron con que los compañeros del trabajador accidentado estaban intentando rescatarle bajo el montón de tierra que le había sepultado, y una vez que pudieron atenderle sólo pudieron certificar su muerte.

Antes de que el cadáver fuera desenterrado por completo de donde había quedado sepultado, los bomberos procedieron a apuntalar la zona en la que se había producido el desprendimiento, un talud de más de dos metros de altura que sufrió el derrumbe justo cuando el obrero se encontraba trabajando al lado. Tras la presencia del juez y el examen de la policía científica, poco después de las 12,30 horas se procedía al levantamiento del cadáver.

F.G.M. trabajaba « hace poco », según uno de sus compañeros, en este solar, sobre el que se levantarán 31 viviendas. Trabaja para la empresa Forexsa, de Plasencia, una subcontrata de Mugasa3, encargada de la construcción de ese bloque de viviendas en un solar que ahora mismo está en proceso de cimentación.


Fuente: www.diariodeavila.es