El empleado de Ses Planes, marroquí y de 48 aós, quedó enterrado al desprenderse arena y rocas
El trabajador Rachib Echeeri, marroquí de 48 años, murió ayer cuando desatascaba junto a un compañero la salida de una tolva de la cantera de Ses Planes, en Jesús, informaron ayer desde el servicio del 112. Echeeri estaba en nómina en esta cantera propiedad de Hermanos Parrot, informaron desde la Comandancia de la Guardia Civil.
El empleado de Ses Planes, marroquí y de 48 aós, quedó enterrado al desprenderse arena y rocas

El trabajador Rachib Echeeri, marroquí de 48 años, murió ayer cuando desatascaba junto a un compañero la salida de una tolva de la cantera de Ses Planes, en Jesús, informaron ayer desde el servicio del 112. Echeeri estaba en nómina en esta cantera propiedad de Hermanos Parrot, informaron desde la Comandancia de la Guardia Civil.

El operario bajó a la tolva -el lugar donde se muelen los áridos extraídos en la cantera- junto con su compañero con el objeto de desatascarla, una tarea que al parecer hay que realizar con frecuencia. Cuando realizaban esta labor se desprendieron la arena y las rocas de una de las paredes y entre dos o tres toneladas cayeron sobre el trabajador, informaron los Bomberos del Consell d’Eivissa, que acudieron a rescatar el cuerpo.

Todo indica que el hombre falleció en el acto. Su compañero no pudo hacer nada por salvarle. Cuando los bomberos llegaron al lugar del accidente, los compañeros del operario ya habían conseguido desenterrarle en parte y de esta forma comprobaron que había fallecido.

Además de los bomberos, también acudió en un primer momento una ambulancia del servicio del 061. Una patrulla de la Policía Local de Santa Eulària también acudió, pero la investigación de este accidente laboral correrá a cargo de los especialistas de la Guardia Civil.

El hombre estaba casado y tenía dos hijos. El 112 puso al servicio de la familia un psicólogo para ayudarles a sobrellevar la tragedia. La esposa del trabajador, que no habla los idiomas locales, acudió al lugar poco después del suceso, que se produjo sobre las cuatro y media de la tarde.

Este accidente laboral coincidió con la visita a Eivissa de la consellera balear de Treball i Formació, Joana Barceló, que lamentó el suceso y reconoció que en el ámbito de la siniestralidad laboral en las islas « queda mucho trabajo por hacer ». Barceló indicó que este año se ha registrado un descenso de la siniestralidad laboral en las islas del 4’3 por ciento, el tercero más alto de todas las comunidades autónomas y recordó que Eivissa en la actualidad cuenta con tres técnicos en previsión de riesgos laborales y que antes sólo había uno.

La siniestralidad laboral en Balears, y en concreto en las Pitiüses, es desde hace muchos años una de las más altas de España, según las constantes denuncias de los sindicatos.


Fuente: J.M. A. / M.T. / C.C. | ULTIMA HORA