Las obras de reparación del socavón de la A-3, a la altura de Perales de Tajuña, se cobraron ayer la vida de un obrero de 35 años que quedó sepultado por un corrimiento de tierras. Otro trabajador resultó herido leve en este mismo accidente. El siniestro se produjo sobre las 16.45 y en un principio se habló de un obrero sepultado hasta la cintura y otro desaparecido.


Las obras de reparación del socavón de la A-3, a la altura de Perales de Tajuña, se cobraron ayer la vida de un obrero de 35 años que quedó sepultado por un corrimiento de tierras. Otro trabajador resultó herido leve en este mismo accidente. El siniestro se produjo sobre las 16.45 y en un principio se habló de un obrero sepultado hasta la cintura y otro desaparecido.

De inmediato se desplazaron hasta allí un helicóptero del SUMMA, un vehículo de intervención rápida (VIR) y varias dotaciones de los bomberos y la Guardia Civil, que comprobaron que uno de los trabajadores ya había fallecido. Los bomberos lograron rescatar al otro obrero, de 45 años, que estaba semienterrado. Fue trasladado al Gregorio Marañón.

El accidente ocurrió en el km 39.

Según varios testigos, el accidente se produjo cuando los obreros procedían a fijar el talud lateral de la carretera con hormigón. Entonces, varias toneladas de tierra se les vinieron encima y sepultaron a dos de ellos. El socavón que estaban reparando se abrió el pasado 31 de marzo, en vísperas de la Semana Santa.