Las tareas de limpieza de aceite de pescado en un barco que se encontraba atracado en el Puerto de Marín se convirtieron a media tarde de ayer en una tragedia laboral. Un hombre de nacionalidad indonesia falleció y otros tres ciudadanos extranjeros resultaron heridos (dos indonesios y un marroquí) de diversa consideración como consecuencia de una intoxicación producida por la inhalación de gases tóxicos derivados de las tareas de limpieza. Ocurrió en la bodega del ‘Bergur SO-400’, un barco de pesca que se encuentra atracado en el muelle de reparación número 1.
El accidente se produjo en cadena, según explicaron diversas fuentes. Uno de los miembros de la tripulación estaba limpiando aceite de pescado en el depósito cuando dio la voz de alarma. Los compañeros fueron a auxiliarlo y, uno a uno, fueron intoxicándose. Cuando las voces que reclamaban auxilio llegaron al exterior, las personas que estaban en las inmediaciones contactaron con los servicios de emergencia, que recibieron la llamada de alarma en torno a las 17.30 horas. Sólo uno de los tripulantes que se encontraban en la bodega salió por su propio pie, con síntomas de sufrir un fuerte mareo. Los Bomberos tuvieron que hacer frente a la escasa visibilidad del espacio para poder rescatar a los heridos, alguno de los cuales tuvo que ser trasladado en camilla hasta la ambulancia. En el interior del ‘Bergur SO-400’ quedó el cuerpo del tripulante indonesio fallecido. Los efectivos del 061 no pudieron hacer nada por salvar su vida.
Los otros tres operarios extranjeros fueron atendidos, en primer término, por el 061 y trasladados con urgencia a las instalaciones del Hospital Montecelo. Según el último parte médico facilitado por el Complejo Hospitalario, uno de ellos, de iniciales T.A.Y y 23 años, fue ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos. Su pronóstico es grave. Sus otros dos compañeros permanecían al cierre de esta edición conscientes y en observación : se trata de K.M., de 39 años, con pronóstico leve, y de un varón de 20 años con pronóstico reservado, cuya identidad no fue facilitada. Éste último tripulante abandonó el barco en camilla. El personal sanitario y los Bomberos de Pontevedra tuvieron que hacer importantes esfuerzos para poder sacarlo al puerto desde el interior del barco por las pequeñas dimensiones del acceso de la bodega.
Cordón policial| A pesar de estas dificultades, los equipos de emergencia realizaron con celeridad su cometido. Pocos minutos después de las 18.35 de la tarde, los Bomberos habían logrado rescatar a los tres integrantes de la tripulación del barco que resultaron accidentados en el siniestro.
Finalizada su labor, quedaron en la zona los miembros de algunos cuerpos de seguridad, a la espera de la llegada del juez para proceder al levantamiento del cadáver que se encontraba en el interior del ‘Bergur SO-400’, en un espacio que fue acordonado por la Policía.
Fuente: Diario de Pontevedra
