Tras señalar que luego del “desalojo quirúrgico” que el gobierno federal efectuó en la comunidad San Rafael, ubicada en la reserva de los Montes Azules, el presidente de la organización no gubernamental “Maderas del Pueblo del Sureste”, Miguel Ángel García Aguirre, sostuvo que ahora la presión es en contra de San Isidro, comunidad que ya ha sido demarcada por el EZLN como territorio autónomo bajo su control, por lo que “si la presión continúa y si se quiere hacer un desalojo ahí, lo que va a haber es un enfrentamiento, una masacre, porque ya es contra el ejercito zapatista”.

Tras señalar que luego del “desalojo quirúrgico” que el gobierno federal efectuó en la comunidad San Rafael, ubicada en la reserva de los Montes Azules, el presidente de la organización no gubernamental “Maderas del Pueblo del Sureste”, Miguel Ángel García Aguirre, sostuvo que ahora la presión es en contra de San Isidro, comunidad que ya ha sido demarcada por el EZLN como territorio autónomo bajo su control, por lo que “si la presión continúa y si se quiere hacer un desalojo ahí, lo que va a haber es un enfrentamiento, una masacre, porque ya es contra el ejercito zapatista”.

García Aguirre, premio nacional de ecología y cuya ONG ha venido denunciando los desalojos de los pueblos choles asentados en los Montes Azules, sobre la ribera del río Lacantún, explicó que San Isidro es una comunidad compuesta por unas 30 familias y que el pasado 8 de febrero cumplió 2 años, los cuales celebraron con un baile al que acudieron los zapatistas de toda la región “y como acto principal pegaron letreros -ustedes publicaron su foto- donde dice “EZLN territorio zapatista, se prohíbe la entrada a funcionarios” ; esto significa una toma de posesión del EZ que ya había fijado su posición el primero de diciembre cuando Marcos dijo “no vamos a permitir ningún desalojo de ningún pueblo zapatista”. Ahora con los letreros puestos ahí, es una advertencia”, acotó.
“No se qué piensa hacer el estado”, indicó García Aguirre luego de explicar que en el 2002 hubo dos intentos de operativos de desalojo por parte del gobierno federal en el que intervinieron con la fuerza pública y con la armada, los cuales se desactivaron porque se filtró la información a la opinión pública. “Estos operativos fracasaron ; estaban planeados y había documentos confidenciales de ellos. Hubo reuniones de alto nivel donde se acordó y se abortó. Fue entonces cuando directamente de la SEGOB decidieron cambiar de táctica”.
Sostuvo que se creó un grupo estratégico liderado por la SRA, anteriormente era dirigido por Semarnat-Profepa, con la premisa de que “la gente que está en Montes Azules tiene necesidad de tierras y que al comprar tierras y ofrecérselas, la gente se iba a salir. Me parece que no es así, no es tan esquemático : hay algunos grupos que ofreciéndoles tierras se van a salir, pero hay otros que no, porque hay una disputa por el territorio, sobretodo con las comunidades zapatistas que son más de la mitad de las que están en Montes azules. Es una cuestión de control del territorio, en manos de quién va a quedar ese territorio. Su análisis es : “No voy a dejar el territorio en manos de compañías multinacionales”, y eso ya lo han ratificado”.

Destacó que han denunciado que “los intereses detrás de estos desalojos son los de Julia Carabias, mediante una aparente ONG, que en realidad es una paragubernamental que se llama “Espacios Naturales” y que tienen un negocio de hoteles dizque ecoturísticos, que en realidad realizan turismo científico”, tanto en Chajul, como en Tzendales y en Lacanjá. “Detrás del aparente ecoturismo están haciendo bioprospección, una investigación de la biodiversidad y están sacando el conocimiento genético sin que el gobierno mexicano tenga ningún control, y esto va a parar a empresas multinacionales de biotecnología. Es la riqueza genética lo que les interesa, y tienen temor de San Isidro que está en línea recta a 3 kilómetros de su hotel en Chajul”.

El investigador puntualizó : “Acuérdate del rancho “La Esmeralda”, donde los zapatistas dijeron al propietario extranjero : “hasta aquí”, y se fue el gringo. Por eso “Espacios Naturales” tiene temor. Yo lo llamo el “Síndrome de la Esmeralda”. Por eso es su desesperación, pero creo que esto les puede resultar al contrario, porque esta ya fue una provocación -el desalojo de San Rafael mediante la división de sus pobladores a través de la intimidación, las amenazas y la entrega de dinero a algunos de ellos, y la intención de hacer lo mismo con San Isidro-”.

Palenque, Chiapas.

ENRIQUE ROMERO.

CORRESPONSAL


Recibido por la Comisión Confederal de Solidaridad de CGT con Chiapas