Cerca de siete mil trabajadores de Volkswagen Navarra, volvieron a manifestarse este lunes por las calles de Pamplona para exigir a la dirección de la compañía «un convenio justo». La marcha, con los representantes del comité de empresa (UGT, Comisiones, LAB, CC y CGT) a la cabeza, portaba una pancarta en la que se leía «Garantía de futuro, por un convenio justo», seguidos de los trabajadores de la planta, de compañías auxiliares y de delegados sindicales de la fábrica de SEAT en Barcelona.
Cerca de siete mil trabajadores de Volkswagen Navarra, volvieron a manifestarse este lunes por las calles de Pamplona para exigir a la dirección de la compañía «un convenio justo». La marcha, con los representantes del comité de empresa (UGT, Comisiones, LAB, CC y CGT) a la cabeza, portaba una pancarta en la que se leía «Garantía de futuro, por un convenio justo», seguidos de los trabajadores de la planta, de compañías auxiliares y de delegados sindicales de la fábrica de SEAT en Barcelona.
Pese a que los sindicatos y la empresa alcanzaron un principio de acuerdo, que consideran importante, para reducir la producción y afrontar con la plantilla actual las necesidades de la planta de Landaben, el presidente del comité, Josu Sánchez Bruna, advirtió de que «el proceso de negociación del convenio no ha avanzado y por lo tanto volvemos a manifestarnos para que cuando nos reunamos de nuevo con la dirección, se pongan sobre la mesa los planteamientos de la representación social», añadiendo que «confiamos en que en los próximos días haya avances significativos en la negociación del convenio, pero si no es así, el comité de empresa seguirá con las movilizaciones».
En este sentido, Sánchez Bruna destacó que la mesa negociadora del convenio deberá abordar las necesidades de producción de los próximos años y, en relación con ésta, la flexibilidad salarial. «Si hay una situación complicada de volumen productivo como la que ha habido estos dos últimos años y si para los próximos años vamos a tener dificultades con las producciones, propondremos articular unos mecanismos para que, aunque dejemos de trabajar, la plantilla no deje de cobrar el salario en la misma proporción que hemos dejado de hacerlo estos dos años». «Eso es innegociable», advirtió el presidente del comité.
Al término de la manifestación se leyó un comunicado en el que denunció que «en las últimas semanas la dirección ha pretendido desarrollar tareas que corresponden a nuestra plantilla, realizando horas extra, introduciendo en nuestra planta empresas del exterior, e incluso contratando nuevos trabajadores, mientras se reducen las producciones y nuestra jornada laboral con la repercusión salarial que ello conlleva».
El presidente del comité señaló que los trabajadores «reivindican garantía de futuro junto a unas condiciones de vida y trabajo dignas, la estabilidad para nosotros y para nuestras familias, así como la de miles de compañeros con los que compartimos la situación y las consecuencias de la política de Volkswagen». Así, Sánchez Bruna advirtió que el comité rechaza que «el eje central de esta política sea el cerrar el máximo de días las instalaciones, haciendo recaer sobre nosotros todo el coste, reduciendo nuestros salarios en la misma proporción que los días que la empresa cierra, y mandando a regulación a miles de compañeros de empresas proveedoras».
«Los que soportamos estas consecuencias», agregó el presidente del comité, «reivindicamos nuestro derecho a hacer frente a ellas para conseguir una garantía y una estabilidad salarial, mejorando nuestras condiciones de trabajo, animando a todos a utilizar el derecho que tenemos como trabajadores a mantener la lucha por las conquistas sociales».
Fuente: noticias.info
