En Sevilla el MayDay fue la manifestación mayoritaria. Una de las manifestaciones más moviditas que se recuerdan por aquí. CCOO y UGT – 200 manifestantes, MayDay – 2000 manifestantes.
La marcha empezó en la Puerta de Jerez. Aunque no hubo sopa de letras en el cartel, si hubo algunos colectivos que fueron como tales con sus banderas y consignas. Estuvieron presentes militantes de CGT y CNT, también estaban allí el grueso de los okupas, MOC, Mujeres de Negro, Asociación de Mujeres que Ejercen la Prostitución y mucha gente a nivel individual. Se desplazaron hasta Sevilla miembros del Colectivo Zapatista de Granada, de la Casa de las Iniciativas de Malaga, del Sindicato Unitario de Huelva y de varios colectivos de Madrid.
Nada más empezar, cuando bajábamos por la Avda. de la Constitución, se empezó a intervenir en los comercios que estaban abiertos. Los manifestantes entraron primero en el Café de Indias, franquicia que ya fue objeto de una acción el día anterior, y después en el Starbucks, ante el estupor de los consumidores y encargados se piquetearon ambos locales y se rompieron algunas vajillas. La manifestación siguió su trayecto y las furgonetas de antidisturbios empezaron a multiplicarse, música, empapelado de cajeros y micrófono abierto señalando los centros de explotación de la mano de obra precaria por los que íbamos pasando.
La siguiente parada fue en la empresa de Telemarketing Sitel, una multinacional estadounidense que lleva los servicios de atención al cliente de Iberia y Wanadoo. Treinta personas se colaron en el edificio delante de las narices del guardia de seguridad y de la policía. Se paró primero en la planta donde se llevaban los servicios de Iberia, se repartieron panfletos y se empezó a hacer sonar los silbatos impidiendo que se desarrollara el trabajo en la plataforma, también se realizó una perfomance llamando a los trabajadores a abandonar su puesto de trabajo, ¡El 1º de Mayo no se trabaja ! Mencionar que los trabajadores, tanto los teleoperadores como los dependientes de las franquicias, no se lo tomaron mal, a parte del susto inicial muchos se reían y nadie dio problemas a parte de algún coordinador que llamó a la policía (no sabia que la policía ya venia con nosotros acompañándonos desde Pta. Jerez). Tras parar el trabajo en Iberia se hizo lo propio con la plataforma de Wanadoo, que estaba en la última planta. Se llevaban panfletos denunciando el reciente despido de treinta trabajadores en esa misma plataforma por negarse a una reducción de su jornada laboral de treinta a veinte horas, tan solo tres días antes. Una vez allí dos escaladores se descolgaron con una pancarta que decía “Telemarketing =Explotación, no al despido libre”. Los escaladores pusieron algo de su propia cosecha, llevaban carteles reclamando un convenio para los trabajadores verticales, que no están reconocidos como trabajadores cualificados y suelen ser contratados como peones en la construcción.
Cuando estaban llegando abajo se produjo el mayor momento de tensión. Había un grupo de personas haciendo de barrera entre la policía y el grupo que estaba haciendo la acción, la mayor parte de la manifestación estaba un poco alejada, a unos metros, ya que el edificio se salía de la ruta de la mani y no se había podido coordinar mejor. Uno de los escaladores calculó mal la cuerda y no podía llegar al suelo. Mientras se enganchaba a un neon de una farmacia para bajar, tres antidisturbios se abalanzaron en su dirección para cogerlo, el grupo de apoyo se interpuso entre la policía y los escaladores y uno de los antidisturbios le propinó un brutal puñetazo a un joven. Los manifestantes reaccionaron y se defendieron, acabando el policía tirado en el suelo y sin el casco que le fue arrebatado por uno de los manifestantes. Hubo algunos golpes más por uno y otro lado hasta que el grupo que permanecía dentro del edificio pudo salir.
La manifestación continuó. La policía ya había aprendido, llamaron refuerzos y a nuestro paso se cerraban todas las franquicias, cerraban las verjas con los clientes dentro y se situaban grupos de antidisturbios en sus fachadas, este fue el caso de los Mac Donalds, Pans and Company, Burger King y de la sede de Comisiones Obreras, que fue el local que mas protección de la policía necesitó después del Corte Ingles ¡Ya caeréis, ya !
En la Alameda, donde se terminaba la mani se hizo otra representación denunciando el problema de la vivienda para los jóvenes y animando a ocupar las 40000 casas vacías que hay en Sevilla. Delante de las narices de la policía se realizó una ocupación publica de un edificio de viviendas en pleno paseo y se desplegó una pancarta que rezaba “43000 viviendas vacías en Sevilla, precario reclama una”.
Terminó la mani en un ambiente festivo. Todo el mundo satisfecho con el resultado, ningún detenido, un solo herido leve que tuvo que ir al hospital, varias franquicias cerradas y la mayoría de las acciones previstas realizadas satisfactoriamente. Los antidisturbios no estaban tan contentos, sobretodo alguno que se llevó un correctivo. Tenemos constancia de que luego han ido cazando grupos dispersos para identificarlos y amilanarlos y ha habido alguna agresión más.
Par : La Haine