Pérez defiende la limpieza en Divina Pastora Las aguas han vuelto a su cauce en el conflicto que mantenían los trabajadores de la empresa municipal de residuos sólidos urbanos (RSU) y el equipo de gobierno.
El acuerdo adoptado afecta a seis empleados con contratos que no se han renovado tras el verano El comité de empresa está satisfecho con la medida
Pérez defiende la limpieza en Divina Pastora
Las aguas han vuelto a su cauce en el conflicto que mantenían los trabajadores de la empresa municipal de residuos sólidos urbanos (RSU) y el equipo de gobierno.
Tras la repentina entrada, casi estampida, de los los empleados de la empresa de recogida de basura en el pleno celebrado el pasado 30 de septiembre, que obligó a la suspensión de éste, y de las reuniones posteriores mantenidas con Pedro Pérez, concejal delegado de Medio Ambiente, se ha llegado a una solución : la creación de una bolsa de trabajo con los empleados afectados para atender a las necesidades futuras de la empresa.
El acuerdo, fruto del último encuentro mantenido el pasado miércoles entre José Luis Fernández Garrosa, concejal delegado de Personal, Pedro Pérez y los representantes del comité de empresa, ha satisfecho a ambas partes. La medida afecta de forma inmediata a seis trabajadores de la empresa, cuyos contratos habían finalizado y no habían sido renovados por « considerarse innecesario para este servicio, debido al descenso de la recogida de basura orgánica tras los meses de verano », según indicaron fuentes municipales. Otros tres empleados, que se encuentran en la misma situación, pasarán a la bolsa de trabajo cuando sus contratos concluyan.
Contratos finalizados
Así lo manifestó el concejal responsable de Medio Ambiente. Pérez reiteró : « Lo que se ha realizado no han sido despidos, sino que los contratos de los trabajadores, en este caso, de hasta seis meses, han finalizado, y por tanto, como en cualquier administración pública, pasan a formar parte de una bolsa de empleo ». El edil ya apuntó durante el pasado pleno : « No podemos renovarlos porque haríamos fijas a esas personas en el Ayuntamiento y sería un fraude de ley que iría en contra del convenio colectivo firmado recientemente ».
El conflicto saltó cuando los trabajadores responsabilizaron a Pérez de incumplir el acuerdo firmado con el comité de empresa, el pasado 23 de febrero. El Ayuntamiento mantiene que esos trabajadores no pertenecían al documento firmado. « Se ha confirmado con la firma de este acuerdo », señaló el edil. Según José Miguel Rivero, portavoz de CGT, éste recogía que los empleados que trabajaran hasta esa fecha « seguirían haciéndolo hasta regularizar su situación, porque hacen falta, y los que no, irían a la bolsa de trabajo temporal ». Algo que, según dijo Rivero, cuando irrumpieron en el pleno, no se ha llevado a la práctica.
Satisfacción
Lo cierto es que el comité de empresa de RSU está contento tras la solución intermedia acordada con el Ayuntamiento. De hecho, se ha cumplido uno de los objetivos principales : que los afectados puedan seguir trabajando. « Creemos en la buena fe por parte de la corporación para cumplir el acuerdo », apuntó Rivero. El secretario sindical recuerda : « Antes de que entráramos en el pleno, la postura del equipo de gobierno era contraria a la continuidad de estos empleados ». Respecto a la interrupción de estos trabajadores durante la sesión plenaria, el concejal Pérez recordó que « la voluntad de trabajo y de negociación no se debe forzar mediante medidas de presión ».