Los trabajadores de la factoría de Delphi en Puerto Real (Cádiz) han radicalizado hoy sus movilizaciones cortando el Puente Carranza de entrada en la capital, así como el nudo de acceso a la factoría, en señal de protesta por el cierre de la planta anunciado por la multinacional el pasado 22 de febrero.
Los trabajadores de la factoría de Delphi en Puerto Real (Cádiz) han radicalizado hoy sus movilizaciones cortando el Puente Carranza de entrada en la capital, así como el nudo de acceso a la factoría, en señal de protesta por el cierre de la planta anunciado por la multinacional el pasado 22 de febrero.
Los trabajadores, más de mil de los tres turnos de trabajo, salieron sobre las nueve de la mañana de la factoría tras celebrar una asamblea las puertas de la planta, según ha explicado el representante de la CGT en el comité de empresa, Isidro Jiménez.
Desde allí, fueron andando hasta el Puente Carranza y lo cortaron durante una hora utilizando piedras y distintos carteles y materiales a los que prendieron fuego. Asimismo, cortaron el nudo de conexión con el Polígono el Trocadero, donde se ubica la planta.
Poco antes de las once de la mañana, los empleados de la factoría volvieron a sus puestos de trabajo tras finalizar una protesta que ha causado retenciones al tener que desviar la Guardia Civil el tráfico por la carretera N-443 y CA-611 por San Fernando.
Según Jiménez, los trabajadores decidieron esta mañana radicalizar sus protestas dos días antes de la huelga general convocada para el próximo miércoles en 14 municipios de la Bahía gaditana y porque «después de dos meses sin solución la cosa tiene que ir a más».
Piquetes para el miércoles
Desde la CGT ya se ha anunciado que no realizarán piquetes informativos ese día «para que la sociedad apoye la huelga por conciencia y no a la fuerza».
Sobre la falta de materia prima con la que trabajar en la factoría, el representante de la CGT aseguró que va «in crescendo» y, de hecho, indicó que muchas máquinas «están actualmente paradas».
Finalmente, criticó la actitud de «terrorismo industrial» de la multinacional estadounidense de fabricantes de automoción, que anunció el pasado 22 de febrero su intención de cerrar la factoría gaditana por pérdidas operativas, asegurando que su intención es la de deslocalizar sus plantas «hacia países que violan sistemáticamente los derechos humanos, como Marruecos, donde los costes de todo tipo son menores que en la Unión Europea».
Fuente: EFE | Imágenes : EFE / Kaos en la red