(información recogida del Diari de Terrassa, Cristina Mas)
El encierro y la huelga de hambre de los “sin papeles” en Terrassa, en el local de la CGT y el Consell de la Joventut, se mantiene desde el sábado pasado. La presencia de la policia el martes en el exterior del edificio supuso un importante sobresalto, pero aseguran que están dispuestos a continuar su proteta. Piden el apoyo de las sociedad terrassense y recuerdan que los resultado de la regularización están muy por debajo de las expectativas. Con el de Terrasa son ya once los encierros en varias ciudades del ára metropolitana.
(información recogida del Diari de Terrassa, Cristina Mas)
El encierro y la huelga de hambre de los “sin papeles” en Terrassa, en
el local de la CGT y el Consell de la Joventut, se mantiene desde el
sábado pasado. La presencia de la policia el martes en el exterior del
edificio supuso un importante sobresalto, pero aseguran que están
dispuestos a continuar su proteta. Piden el apoyo de las sociedad
terrassense y recuerdan que los resultado de la regularización están
muy por debajo de las expectativas. Con el de Terrasa son ya once los
encierros en varias ciudades del ára metropolitana.
El grupo de apoyo
anunció la convocatoria de una asamblea el sábado para que la
ciudadanía pueda conocer los motivos de la protesta.
El despliegue de 6 dotaciones de la Policia Nacional, entre la tres y
las seis de la tarde del martes sobrsaltó a los inmigrantes encerrados
en los locales de la CGT y el Consell de la Joventut. Los agentes
identificaron y registraron a las personas que se acercaban a apoyar su
protesta. En un momento temieron un desalojo, pero la policia no
accedió finalmente al recinto. La llegada de los medios de comunicación
sirvió para levantar los ánimos.
“Denunciamos el acoso policial, que no es propio de una democracia”,
lamentó Rachid, portavoz de los encerrados. Aseguró que los 26
marroquíes encerrados están dispuestos a continuar su protesta y la
huelga de hambre iniciada. Alertaron que las últimas medidas para
facilitar el empadronamiento no resuelven su problema, porque le
principal obstáculo que les impide acceder a los papeles es la
dificultad de encontrar un contrato laboral.
Recordaron que no son los únicos : al menos medio millón de sin papels,
según datos del Ministerio de Trabajo, no han podido acceder a la
reguralización, a 19 días del fin del proceso. El portavoz de los
encerrados solicitó que los plazos se maplíen y que no se limite la
legalidad a los inmigrantes que puedan presentar un contrato laboral.
Denunció la pasividad de los gobiernos de sus países de origen y pidió
el apoyo de la sociedad terrassense a sus reivindicaciones.
El grupo ciudadano de apoyo constituido alrededor del encierro manifestó
en un comunicado que trabajará por “ampliar la voz de personas que
sóloi piden su derecho a vivir como personas”. “La regularización es
indispensable para evitar el deterioro social : ellos son la
consecuencia de un mundo injusto”, proclamaron. Apelaron a la historia
de la inmigración en Terrassa y aseguraron que “la negación de los
derechos de los inmigrantes en un problema de todos”. El grupo de apoyo
pidió mantas, colchonetas, suero y zumos para los encerrados y anunció
que el próximo sábado se celebrará una asamblea abierta a la ciudadanía
para explicar las razones de la protesta.
ONCE ENCIERROS
Con el de Terrasa, son once los encierros de inmigrantes que se
desarrollan estos dían en Barcelona, L’Hospitalet, Sant Vicenç del
Horts y Santa Coloma de Gramenet. En total agupan a unos 450
inmigrantes, estando diez de ellos hospitalizados a consecuencia de la
huelga de hambre. Los encierros se extienden y se consolidan, porque
los inmigrantes no ven salida en el proceso de regularización.
Zeddou Zaid, Licenciado en Historia..
“…. es nuestra última carta”
“La democracia sin trabajo, sin libertad, no es democracia”
(miércoles 13 de abril 2005, información recogida del Diari de Terrassa, Cristina Mas)
Zeddou Zaid es uno de los 26 inmigrantes encerrados en el local de la CGT de Terrassa, y en huelga de hambre. Llegó a Terrassa procedente de la zona del Atlas y lleva meses sin encontrar un empresario dispuesto a contratarle. Es licenciado en Historia, aunque en Marruecos trabajaba como comerciante. Tiene 37 años y asegura que, de haber sabido lo que le esperaba en Europa, no habría cruzado el Estrecho.
¿Por qué emigró ?
El primer motivo es económico : en Marrucos no hay trabajo. Además en Europa hay más espacio para la libertad y la democracia.
¿Cómo llegó a Terrassa ?
Vine directamente aquí, con visado de turista. Tenía amigos en Terrassa y ellos me acogieron.
¿Qué ha hecho desde entonces ?
No he parado de buscar trabajo, en la hostelería, en la construcción, incluso en la agricultura. Sólo he encontrado trabajos puntuales, sin contrato.
¿Esperaba encontrarse en esta situación ?
No. La democracria sin trabajo, sin libertad, no es democracia. Si hubiera sabido que ésta sería mi situación, no habría abandona mi casa y mi familia.
¿Cómo cambiaría su asituación de tener papeles ?
Podría integrarme, trabajar, formarme como obrero, fundar una familia… creo que podría hacer muchas cosas.
¿Por qué el encierro ?
Es la última carta que nos queda por jugar. Hemos buscado trabajo, nos hemos manifestado… No teníamos otra alternativa para acceder a la regularización.
