CGT PLANTEA UN RECURSO DE ALZADA CONTRA EL EXPEDIENTE, JUSTIFICADO POR RAZONES ECONÓMICAS A PESAR DE LOS BENEFICIOS.-El dividendo que César Alierta reparte entre los accionistas de Telefónica, 6.755 millones de euros, duplica el coste total del ERE, cifrado en 2.700 millones de euros, que destruirá 6.500 empleos.
F. Fafatale / Madrid - Martes 27 de septiembre de 2011.  Número 157  Número 158

El que César Alierta caliente el sillón
del consejo de administración le
cuesta a Telefónica casi lo mismo
que el despido de cada uno de los
6.500 trabajadores que se acojan al
expediente de regulación de empleo
(ERE) planteado por la operadora:
unos 400.000 euros. En concreto,
415.000 euros es el precio que pagará
la operadora por enviar al paro a
6.500 personas con más de 53 años y
con un futuro más que incierto.

El que César Alierta caliente el sillón
del consejo de administración le
cuesta a Telefónica casi lo mismo
que el despido de cada uno de los
6.500 trabajadores que se acojan al
expediente de regulación de empleo
(ERE) planteado por la operadora:
unos 400.000 euros. En concreto,
415.000 euros es el precio que pagará
la operadora por enviar al paro a
6.500 personas con más de 53 años y
con un futuro más que incierto.

“El propio presidente de Telefónica
podría haberse acogido a uno
de esos ERE, ya que tiene 66 años”,
ironiza Álex López, secretario de la
Federación de Transportes y Comunicaciones
(FETYC) de CGT, a quien
le parece indecente que una empresa
con beneficios (10.167 millones de
euros en 2010) anuncie a la vez la
destrucción de 6.500 empleos
(el
20% de la plantilla en España) y un
bonus para directivos de 450 millones
de euros
. “Parece que se están
riendo de un país con un 20% de paro”,
protesta López.

En la misma línea de contrastes,
mientras el ERE de Telefónica rebaja
al 66% del salario la remuneración
de los trabajadores despedidos, la retribución
total del consejo y de la dirección
de Telefónica fue superior a
los 42 millones de euros en 2010
. De
hecho, la operadora –privatizada en
1999– es la tercera compañía del Ibex
35 con una retribución más alta, sólo
por detrás del Santander de Botín
(101 millones de euros) y de ACS de
Florentino Pérez (47,8 millones de
euros).

Aún más, Alierta es el ejecutivo
de su sector mejor pagado de
Europa
, con 8,6 millones de euros en
efectivo y en acciones, más una aportación
al fondo de pensiones de otros
6,6 millones de euros, según El País,
que cita fuentes conocedoras de la
empresa. Telefónica no hace pública
la retribución de su presidente.

“Los trabajadores de Telefónica
están muy indignados”, afirma Álex
López. “Esos 6.500 puestos de trabajo
dignos no van a volver. Pero es que
los que se quedan tendrán que soportar
un convenio colectivo regresivo,
si no el peor, que empobrece la
garantía del empleo, las externalizaciones,
la movilidad geográfica forzosa
o el mantenimiento del poder
adquisitivo. “La gente tiene miedo al
traslado forzoso o al cambio de actividad”,
confirma López.

Además, el
ERE afecta muy negativamente a nivel
organizativo, porque “hay zonas
donde podría irse un 50% de la plantilla,
como Burgos, o un 35%, como
Extremadura”. López se teme que
una pequeña parte de esos puestos
se sustituirán por subcontratados,
que es “trabajo más barato, más precario,
con más riesgo, con peor formación
y menos seguridad”.

CGT ya ha anunciado que presentará
un recurso de alzada contra
el ERE. “No sólo porque faltan
los datos económicos del primer semestre
de este año y porque se
aportan causas económicas en una
empresa con beneficios”. Además,
explica el sindicato en su web, la
redacción del Plan Social “es inconcreta,
muy imprecisa, y no da plenas
garantías
de los compromisos
de creación y garantía de empleo,
ni solución a los problemas que
causará la destrucción de empleo
masiva en Telefónica”.

Pese a todo, la operadora informa
a sus accionistas
cómo va a compensar
la pérdida de 2.700 millones de
euros, paro incluido, que supondrán
los 6.500 trabajadores despedidos:
“Los resultados de la Compañía en
los próximos ejercicios se verán favorecidos
por la mayor eficiencia en
costes de personal”. Por si no quedara
claro, en sus resultados semestrales
de 2011, Telefónica reitera que
no peligran “todos sus compromisos
de remuneración al accionista”.

Lo cierto es que los dividendos
de Telefónica, operadora otrora pública,
son escandalosos: 6.755 millones
de euros en 2010, en torno a
1,40 euros por acción. Y la política
para los próximos años es seguir
aumentándolo, hasta 1,6 euros por
acción en 2011 y un mínimo de 1,75
por acción en 2012.

Tan altos son estos dividendos,
que incluso la agencia de rating
Standard & Poor’s le rebajó la nota
en un escalón en agosto, desde A- a
BBB+, al considerar que la reducción
de la deuda de Telefónica será
inferior a la que se preveía
por una
política de dividendos agresiva. Por
cierto, la deuda financiera neta de
Telefónica, a diciembre de 2010, ascendía
a 55.593 millones de euros.

Otra de las vías para conseguir hacer
caja, por el momento frustrada,
es la salida a bolsa de Atento, la filial
de atención telefónica de Telefónica.
La salida a bolsa fue abortada en junio,
cuando, en medio de las turbulencias
de los mercados, Telefónica
se vio obligada a rebajar el precio mínimo
en el que podía quedar situada
cada acción hasta 17,25 euros, frente
a los 19,25 euros previstos, desde un
máximo de 25 euros. Esa banda de
precios suponía valorar la compañía
entre 1.155 y 1.500 millones de euros.
A finales de julio, su responsable
financiero explicaba a analistas que
la salida a bolsa de Atento se retomará
cuando las condiciones del mercado
mejoren.

Telefónica justifica que “la única
vía” para asegurar la rentabilidad es
la reducción de costes de personal.
La actual dirección argumenta que
en un entorno competitivo con precios
a la baja y avances tecnológicos
,
hay que reducir costes de personal
(vía ERE o convenios colectivos más
precarios). Según César Alierta,
Telefónica habría quebrado si no hubiera
aplicado los ERE anteriores. Al
respecto, Álex López cifra en 50.000
puestos de trabajo, si no más, los que
se han destruido desde la privatización
de Telefónica. Desde este sindicato
sostienen que “nunca debiera
haberse privatizado”.


Más sobre los negocios de Telefónica

Cada vez más internacionalizada

Telefónica ha anunciado una remodelación, la más agresiva
desde que César Alierta se enchufó a la operadora en 2000.
La división española se integra en Europa, con lo que sólo
quedarán dos unidades geográficas:
Europa y Latinoamérica.
Otra de las novedades es la creación de Telefónica Digital,
una división con sede en Londres y 2.500 trabajadores que
se encargará de los servicios de Internet.

El ADSL más caro

Según la comparativa anual que realiza la Asociación de
Internautas, el ADSL de España es el sexto más caro y el
noveno más lento
de la Unión Europea. España es el país
más caro de la UE en telefonía y servicios de comunicaciones,
con precios casi un 30% superiores a la media europea,
según un informe de agosto de 2011 realizado por la
oficina estadística comunitaria Eurostat.

- Cómo ofrecer el ADSL más caro de Europa como una ganga

Alierta siempre
cae de pie

Mientras era presidente del exmonopolio
público Tabacalera, el
presidente de Telefónica, César
Alierta, compró acciones de la
compañía en bolsa, conjuntamente
con su mujer y su sobrino,
en una operación probada por la
justicia como “delito de información
privilegiada” que les reportó
un beneficio de 1,86 millones de
euros. Toda esta información está
recogida como “hechos probados”
en la sentencia de la
Audiencia Provincial del 17 de
julio de 2009, que absolvió a
Alierta y su sobrino “por haber
prescrito el delito de uso de información
privilegiada del artículo
285 y 286 tercero del Código
Penal”. Finalmente, el Tribunal
Supremo confirmó la absolución
del presidente de Telefónica en el
caso Tabacalera, al considerar
prescrito el delito.