Los trabajadores en huelga y la empresa Ferroser acuerdan ampliar los vehículos y dotaciones que realizan los servicios mínimos para afrontar la « preocupante » situación de Basauri
La jornada de servicios mínimos que los trabajadores de la limpieza viaria en huelga realizarán esta noche traerá consigo una importante novedad con respecto al pasado lunes, primer día en el que entró en funcionamiento el turno extraordinario. El alarmante estado en el que se encuentran las calles de Basauri, repletas de bolsas de basura y suciedad, llevó ayer a los propios operarios a plantear tanto al Ayuntamiento como a la empresa Ferroser, responsable del servicio, una ampliación de los equipos encargados de adecentar cada cuatro días el municipio. « El lunes quedó basura por recoger porque los medios eran insuficientes. Así que, si tenemos en cuenta todos los desperdicios acumulados en las casas y la falta de medios, la situación podría haber pasado a ser más que preocupante », explicó el delegado de CGT, Txutxi Villaverde.
El acuerdo al que han llegado las partes en conflicto, con el beneplácito del Consistorio, plantea que esta noche recorran la localidad cuatro camiones, uno más que la anterior ocasión, y que cada vehículo cuente con tres peones, en vez de dos. Además, participarán en las tareas de limpieza dos vehículos más pequeños y un tercero de apoyo, preparados para acceder a las calles más estrechas.
Con todo, los trabajadores no podrán retirar toda la basura que se encontrarán a su paso. Según sus propios cálculos, deberán enfrentarse a más de 150 toneladas de residuos, entre los que ya se encuentran en la calle y los que los vecinos han acumulado en sus domicilios por orden del alcalde. Por ello, « y en una visión muy optimista », podrán retirar cerca de la mitad, con lo que Basauri afronta un fin de semana en el que la basura puede copar todas sus calles y comenzar a provocar los primeros focos de infección. En este sentido, varios técnicos del Departamento de Sanidad del Gobierno vasco inspeccionaron ayer la población para verificar su estado. Las conclusiones que hayan extraído de su visita, que serán comunicadas « lo antes posible al Ayuntamiento », servirán para respaldar la solicitud de ampliación de los servicios mínimos efectuada por los dirigentes municipales.
Mientras tanto, los residentes y propietarios de establecimientos comerciales continúan « viviendo una auténtica pesadilla », al tener que soportar « en todo momento malos olores » que desprenden los miles de kilos de desperdicios esparcidos por las aceras.
