Desde muy pequeño, José Torremocha había abrazado las ideas libertarias.Convencido de la necesidad de que había que luchar si se quería alcanzar la anhelada justicia social, se había afiliado a la CNT con tan sólo 12 años.
Por eso, cuando se produjo el levantamiento del 18 de julio de 1936, el joven Torremocha no dudó en liderar en su pueblo natal, Las Navas de la Concepción (Sevilla), la resistencia frente a los militares sublevados, aunque se mostró en todo momento contrario a cualquier represalia contra los caciques de la zona y los habitantes del pueblo partidarios del Golpe.
Pronto se supo que el levantamiento no sería fácilmente aplastado y, ante el avance del Ejército nacional, José Torremocha partió hacia Madrid con su familia y algunos de sus compañeros de la CNT. Ya en la capital, y ante la fuerte ofensiva de los nacionales, Torremocha participó en la defensa de la ciudad como teniente de las milicias populares.
Al término de la Guerra Civil, este militante libertario sufrió las consecuencias de la represión puesta en marcha por el aparato franquista. Durante 19 años, José Torremocha estuvo preso en los duros penales de El Dueso, Santoña y El Puerto de Santa María, entre otros, por su compromiso político.
Infatigable luchador antifranquista, Torremocha aprovechaba sus escasos periodos de libertad para establecer contactos con sus antiguos compañeros cenetistas, que seguían luchando contra el Régimen en la clandestinidad.
Precisamente, durante la huelga de tranvías del año 1951 en Barcelona, José Torremocha tuvo un papel destacado, en la que sería considerada la primera manifestación popular de rebeldía contra el Gobierno franquista.
Mientras tanto, en Francia, la CNT se debatía en luchas internas.Desde su llegada al país vecino en 1962, Torremocha participó en los plenos de Toulouse, Marsella y Burdeos al lado de la corriente crítica. Pero será en el Congreso de 1979, cuando se producirá la escisión del sindicato. En este momento, José Torremocha apoyará las posturas antidogmáticas que dieron lugar al nacimiento de la CGT.
Fiel a sus ideales, mantuvo su compromiso político hasta su muerte.Apegado a la vida, Torremocha no dudó en desprenderse de todo lo que consideraba material antes de despedirse para siempre.Como era su deseo, su cuerpo no fue enterrado ni reducido a cenizas.Hacía 28 años, José Torremocha había donado a la ciencia su posesión más preciada.
José Torremocha, militante libertario y anarcosindicalista, nació el 19 de junio de 1909 en Las Navas de la Concepción (Sevilla) y falleció el 8 de junio de 2005 en Barcelona.
Fuente: ISABEL MUNERA | EL MUNDO
