Cuando se fueron extendiendo las aplicaciones de plataforma, las empresas las vendieron como un adelanto tecnológico, neutro como el agua y donde quien tenía el problema era quien no lo aceptaba, no se adaptaba al futuro. En realidad, über, deliveroo, glovo y tantos otros de futuro, de innovación no ofrecen nada: se limitan a adaptar una interfaz nueva por el viejo concepto del trabajo a destajo, sin garantía de Salario Mínimo ni abono de las cotizaciones sociales que corresponderían.

Es decir, estamos ante un modelo de negocio basado en el fraude y la explotación por debajo de los mínimos legales de garantías por el trabajador/a. Las economías de plataforma se limitan a cambiar la plaza del pueblo para contratar jornaleros, pagos asociados a cantidad producida, por una pantalla de smartphone, nada más que esto.

Es decir, estamos ante un modelo de negocio basado en el fraude y la explotación por debajo de los mínimos legales de garantías por el trabajador/a. Las economías de plataforma se limitan a cambiar la plaza del pueblo para contratar jornaleros, pagos asociados a cantidad producida, por una pantalla de smartphone, nada más que esto.

No es de extrañar que Über tenga que pagar 498 millones de Euros como consecuencia de la regularización de conductores en Gran Bretaña, tampoco las 47 sentencias acumuladas en el estado español por fraude a la seguridad social. Este se el volumen de su ilegalidad.

Ante esta situación el gobierno del estado tenía dos opciones: Iniciar un proceso de regularización masiva a todo el sector haciendo cumplir simplemente lo que dicen las leyes vigentes o echar por el camino del medio con una legislación ad hoc acordada con la patronal para hacer un traje a medida. Desgraciadamente, han elegido por esta segunda vía, con el inestimable apoyo de los agentes sociales también conocidos cómo CCOO y UGT.

La ‘Ley Rider’ trata dos puntos esenciales: Una presunción de laboralidad de los trabajadores de economías de plataforma que distribuyan mercancías y una obligación de información del algoritmo del servicio a la representación de los trabajadores (el sistema de inteligéncia artificial que premia a unos riders y castiga a otros). Pero también hay otros muchos puntos que no ha tenido en cuenta…

Presunción de laboralidad y limitación a economías de plataforma de riders

A pesar de que siempre es más positivo todo fortalecimiento de presunción de ser un asalariado de la empresa, es decir un falso autónomo, hay que tener en cuenta lo siguiente:

• Estamos ante una “presunción”, no una obligación. Por lo tanto es de suponer que los litigios judiciales continuarán, las empresas no cambiarán su posicionamiento porque el ‘problema’ continúa individualizado.

• Este pequeño reconocimiento, apoyado por una avalancha de sentencias en la misma línea, se limita a los riders. Es decir, quedan excluidos otros sectores donde los buitres del trabajo a destajo están metiendo el pie, como conductores, trabajos de hogar y muchos etcéteras. Todo aquello que se conoce como überización y que no es más que el peldaño que hay debajo la precariedad.

Información del algoritmo de evaluación de perfiles a la Representación Legal de los Trabajadores

La Ley añade un precepto de información para los representantes elegidos por elecciones sindicales. No hay que ser muy avispado para tener claro que estas empresas realizarán un procedimiento de creación de sindicatos amarillos que legitimen comités de empresa en sus manos. Aunque en algún caso no fuera así, la propia ambigüedad del redactado hace muy difícil garantizar que la información proporcionada sea real sin poder tener acceso real a la codificación operativa. Papel mojado.

Que no dice esta ley

• No prohíbe la subcontratación. Es decir, las empresas podrán lavarse las manos derivando responsabilidades a subempresas pantalla o creando falsas cooperativas de trabajadores para burlar las mínimas garantías.

• No aborda el problema de las personas migrantes que han y estan trabajando sin papeles. Desde la CGT de Catalunya consideramos que el gobierno tendría que haber regularizado la situación laboral de las personas que han sido explotadas por alguna de las empresas de riders, incluyendo aquellas que lo estando haciendo bajo la forma de uso de cuentas ‘alquiladas’.

Pero incluso estos pequeños cambios, que desde el secretariado permanente de la CGT de Catalunya calificamos como simple maquillaje, son excesivos para empresarios que no quieren ningún límite para su libertad de ultraexplotación: Glovo ha abandonado la CEOE y está creando una asociación de empresas de reparto, lo que supondrá en poco tiempo, la creación de una patronal del sector.

Es probable que este nuevo lobby desee tener un convenio colectivo sectorial en breve, negociado con sindicatos amarillos a su servicio, como pasó hace un tiempo con las empresas multiservicio o al convenio de grandes superficies y almacenes.

Desde la CGT de Catalunya heacemos un doble llamamiento a los y las trabajadoras riders: solo la organización permitirá parar los pies a una patronal que nunca tendrá bastante, que vive del sufrimiento de quien pedalea 6 o 7 días en la semana para tener un sueldo de subsistencia.

Esta ley no ha cambiado nada, a quien temen es a nosotros, trabajadores y trabajadoras explotados. Pasemos a la acción.

Comunicado del Secretariado Permanente de la CGT de Catalunya

 


Fuente: Secretariado Permanente de la CGT de Catalunya