La plataforma local Lasarte-Oria Bizirik ha organizado una serie de mesas redondas de cara a debatir ciertos aspectos de la incineradora. Así, hace unos días dieron comienzo en el antiguo edificio REM (hoy Landaberri Ikastetxea) las mesas redondas que reunieron a diversos partidos políticos y a sindicatos con Arantxa Kalzada como moderadora.
En primer lugar, tomó la palabra el representante de EA, Nacho Izeta, propuso « reducir la generación de basura y compostar 22.000 tonaledas incinerando el resto ». « El siete por ciento de lo incinerado se puede reutilizar y el resto se puede vitrificar ».
Asimismo, Asier García, de Zutik afirmó que con la incineración « no se incentiva el reciclaje ni la separación de residuos ». Acusó a las instituciones de una marcada « falta de transparencia » e instó a organizar una « consulta popular ».
Por su parte, el miembro de Lasarte-Oria Aurrera, Zigor Iriondo aseguró que las instituciones « no han provocado un debate puesto que saldrían perdiendo » y que « ha habido muchos datos ocultos ». Además, añadió que « proyectos como el de la REM o el deTerestegi fueron paralizados » por la respuesta social.
El concejal de IU-EB en el consistorio local, Ricardo Ortega, denunció que « al cabo de los años las incineradoras de última generación se vuelven obsoletas ». De la misma manera, dijo que « sólo es segura la incineradora que emite cero residuos » y que « son pelgrosas hasta que se demuestre lo contrario ». Asimismo, señaló que « los ayuntamientos no pueden oponerse a lo que dice la Diputación » y que esto provoca que se evite « el debate social ».
Postura de sindicatos
Diversos sindicatos tomaron parte en otra de las mesas redondas. Por ejemplo, LAB criticó « el procedimiento a escondidas » que se han realizado. « Habría que extender el trabajo en contra de la incineradora », dijeron.
Por otra parte, ESK indicó que « tanto la incineradora como el vertedero son fracasos de los políticos ». Según sus palabras, « no elimina residuos sino que los crea ».
Los representantes de CC.OO. explicaron que el proyecto es « un derroche de recursos » y que « en 1997 dicho proyecto se paralizó en Astigarraga y hoy también se puede detener ».
Desde ELA, denunciaron que hay un « deficit democrático » puesto que las « instituciones toman decisiones por su cuenta ». Aludieron, además a la reducción de residuos.
Los miembros de CNT culparon al « sistema capitalista » del problema y aseguraron que coinciden « con la postura de la plataforma lasarte-oriatarra ».
Según CGT, la clave está en « reducir el consumo hasta lo necesario ». Ellos apuestan por las « plantas de reciclaje y compostaje ». Por otro lado, USO-LSB denunció la « falta de conciencianción » y criticó a los políticos « por la forma de tomar decisiones ».
Por último, el representante de EHNE sentenció que si siguen así « la próxima generación no conocerá la agricultura ». « En 50 años no quedará suelo agrícola por eso la sociedad debe elegir si en Euskal Herria queremos que siga habiendo agricultura », dijo.