Ascensión López acude arropada por todas las asociaciones de bebés robados del Estado a presentar las más de 90.000 firmas que apoyan su indulto.- CEAQUA
Es la primera sentencia firme contra una “víctima” de la trama de bebés robados en España. Ascensión López denunció a su tía adoptiva, miembro de la Orden religiosa de la Caridad en Almería, por su implicación en el “negocio” de su adopción en 1962. Tras varias apariciones públicas contando su infancia, la monja denuncia a Ascensión por un delito “injurias y calumnias”. En 2015 se celebra el juicio. Ascensión es condenada a una indemnización de cuarenta mil euros y tres mil euros de multa que se traduciría en seis meses de cárcel sino puede afrontar el pago. Un indulto, solicitado al Gobierno, le ha dado tregua para paralizar esta dura sentencia judicial. Este viernes ha conocido la noticia del fallo. El ministro de justicia, Rafael Catalá, ha ratificado que en una reunión del pasado 20 de octubre se anuló el indulto. Ascensión espera conocer los detalles de la sentencia oficial en el juzgado el próximo lunes.
¿Cuánto tiempo lleva esperando el indulto?
Ha sido una espera demasiado larga. Casi 18 meses sin saber cual sería mi futuro. Me encuentro en shock y he salido a dar una vuelta con mis dos hijos para poder asimilar la noticia. A las 7 de la mañana me mandaban un mensaje de condolencias. La prensa local había vuelto a filtrar el resultado judicial de la sentencia con la anulación del indulto. Ya ocurrió con el juicio del año 2015. Hoy ha vuelto a suceder con el dictamen que estaba esperando. He llamado al juzgado para que me digan dónde puedo recoger la respuesta oficial. Es muy triste que un periodista local te cuente cómo va a ser tu vida en los próximos años. Y el motivo parecía justo, conocer la verdad de mi pasado y hacer justicia pero parece que de esta trama no quieren que se conozca ningún detalle.
La verdad es que no. Es demasiado duro que te digan en la cara que no tienes razón y encima que la noticia se la den a otro. La reunión sobre la anulación del indulto se celebró el pasado día 7. Yo entregué el recurso en el mes de julio de 2016 y hasta este viernes no he obtenido respuesta. La ayuda de María Bueno, presidenta de la plataforma X24 fue fundamental para presentarlo al Ministerio de Justicia. Elaboraron de forma muy extensa un documento de casi cien páginas. Incluso un médico forense me hizo un informe sobre mi deteriorado estado de salud, mis problemas emocionales, mis cargas familiares, ya que soy una mujer separada a cargo de dos hijos.
¿A qué se enfrenta con esta condena?
El juicio se celebró en el año 2015 por una denuncia presentada por mi tía adoptiva. Alegué muchas pruebas documentales y creía que la justicia estaría de mi parte. Entre los datos aportados se encuentra los expedientes de las tres identidades con las que estaba registrada en organismos oficiales y en algunos de ellos aparecía su firma. Nunca reconoció su implicación. Sólo que mi padre adoptivo le pidió que la ayudara con los papeles para adoptar a una niña de un orfanato de Sevilla. Nada más. Ningún detalle nuevo, a pesar de que tengo grabado un vídeo de su hermana donde reconoce que por mi adopción se pagó una suma de casi 250.000 de las antiguas pesetas.
¿Cómo averiguó sus tres identidades en los registros?
Hasta los ocho años en mi familia me habían llamado María Dolores, mis padres y todo mi entorno pero cuando fui a pedir mi partida de nacimiento para hacerme el DNI no me sabían decir dónde se encontraba. Le pregunté a mi tía y me dijo que dijera en el registro Ascensión. Ahí encontré una nueva pista pero era muy joven y no me pareció raro que ella tuviera detalles de otro nombre mío. Cuando decidí investigar el fraude de mi adopción, pido mi expediente en la Diputación de Sevilla. Me indican que el nombre del bebé es Consuelo. Como padres adoptivos constan los que me criaron, Cristóbal y María.
¿Ha pensado alguna vez que su tía adoptiva pudiera intentar arreglar la situación?
Ascensión López de pequeña.
Nunca olvidaré su trato esquivo y el de toda mi familia adoptiva. Cuando me enteré con ocho años de la verdad, que era adoptada, todos me decían que ella conocía los detalles. Siendo ya más mayor con 16 años le preguntaba y me decía que nunca iba a encontrar ningún dato, que bien se habían encargado de esconderlo.
Decidí montar la asociación de bebés robados en el año 2011 y llevarla al registro oficial en Almería, pero la noche de antes la llamé. Aún hablábamos de vez en cuando. Le dije que si me daba alguna pista, algún hilo del que tirar daba el tema de la asociación por cerrado y que no iría más lejos. Me volvió a repetir lo mismo, que siguiera buscando que nunca iba a encontrar nada.
¿Cómo espera enfrentar el resultado de la sentencia a la que ha sido condenada?
La verdad que me cuesta pensarlo aún. Estoy en shock y no sé quién podrá hacerse cargo de mis dos hijos, ya que para pagar la multa a esta mujer, tendría que entregar mi única vivienda en propiedad y me quedaría prácticamente sin nada. Ellos son mayores de edad pero demasiado jóvenes. Solo tienen 19 y 23 años para vivir con este trauma de ver condenada a su madre.
La otra cantidad, la multa de los tres mil euros, se podría convertir en pena de prisión de casi seis meses sino presento la cantidad en el plazo que me diga la justicia. No sé de dónde quieren que saque esta partida. Ni el apoyo de noventa mil firmas que he recopilado, ni la ayuda de todas las asociaciones de bebés robados en España me ha permitido que el Gobierno se de cuenta de mi delicada situación. Solo buscaba la verdad y ahora todas las víctimas que hemos hablado saben cómo las puede tratar desde la justicia si siguen dando datos. Buscan silenciarnos para siempre.
Ascensión de niña junto a su madre adoptiva.
¿Se ha arrepentido en alguna ocasión de haber hablado de esta mujer?
La verdad que no me arrepiento. He tenido durísimas consecuencias por decir lo que era verdad, lo que creía que la gente debía conocer pero nunca pensé que la justicia me iba a dejar tan desamparada.
Mis compañeras de la asociación bebés robados de Almería me han apoyado siempre, todos los colectivos a nivel nacional pero te sientes muy frustrada cuando no hay resultado y la primera en caer en un banquillo es la propia víctima. Ninguno de aquellos médicos, enfermeros, curas o monjas están en la cárcel ni pagando multas. Nos podemos sentir muy orgullosos de lo mal que se están haciendo las cosas.
¿Cree que el Gobierno podría rebajar la pena de su condena?
Mi única esperanza es que el tiempo de prisión se traduzca en ayudas a la comunidad y no tengan que verme mis hijos en la cárcel. Ojalá que podamos lograr que se paralice porque nunca tendré el arrepentimiento de ella que hasta el momento sería la única fórmula para retirar los cargos.