Desde los distintos estados de la U€ que, en los últimos días, su mayor preocupación era el reparto del poder en el Consejo, la Comisión y el Banco Central Europeo, nada se ha dicho sobre el asesinato de decenas de migrantes en uno de los campos de confinamiento que la U€ tiene fuera de sus fronteras.
La U€, esa que se vende como la “Europa de los Derechos Humanos”, adoptó una política única y sin fisuras: la Europa fortaleza, frente a las migraciones de cientos de miles de personas que o bien huyen de países (en otros tiempos colonias del imperialismo europeo) en conflictos armados, bien de países empobrecidos por la acción de rapiña de sus recursos por esta misma U€, bien de países donde el cambio climático producido por el modelo extractivista y de explotación de las multinacionales ha arrasado la tierra, las cosechas y los modos de vida autóctonos, o simplemente que se dan los tres f
La U€, esa que se vende como la “Europa de los Derechos Humanos”, adoptó una política única y sin fisuras: la Europa fortaleza, frente a las migraciones de cientos de miles de personas que o bien huyen de países (en otros tiempos colonias del imperialismo europeo) en conflictos armados, bien de países empobrecidos por la acción de rapiña de sus recursos por esta misma U€, bien de países donde el cambio climático producido por el modelo extractivista y de explotación de las multinacionales ha arrasado la tierra, las cosechas y los modos de vida autóctonos, o simplemente que se dan los tres factores a la vez.
La U€, en una falsa política de cupos que jamás fue acatada por los estados (reparto por los estados miembros de una cantidad de migrantes y/o refugiados), solamente da paso a aquellas migraciones que sean “funcionales para la economía de cualesquiera de los estados miembros”, es decir, mano de obra cualificada y muy productiva y concede el estatus de “nacional” a golpe de talonario, siempre que se invierta más de un millón de euros en bienes inmuebles, al resto de personas migrantes, se les aplica la “Europa fortaleza”, externalizando a países (estados) tan nada democráticos, sino todo lo contrario, autoritarios y represivos, como Turquía y Libia, los riesgos de controlar a esas miles y miles de personas que huyen del hambre, la represión o, simplemente se han creído en el derecho universal a residir donde cada persona considere.
La U€ con esta política de “externalización de los riesgos”, desde 2017, ha entregado a Libia y a Turquía, cientos de millones de euros, para que impidan el paso de miles de migrantes, a los cuales se les confina en campos del horror, en condiciones inhumanas y, al igual que las políticas migratorias estadounidenses, se les deja morir por el deterioro de sus condiciones de vida.
El Estado español, en su responsabilidad como guardián de la frontera sur, aplica la misma política de externalización de riesgos, en este caso con Marruecos, tan poco democrático, represor y autoritario como Turquía y Libia, y se da carta blanca y decenas de millones de euros para que sus naves de guerra (guardacostas), sean las responsables de recoger, confinar y devolver a sus países de origen a esas miles de personas, que hace ya mucho tiempo perdieron la condición de personas para ser simplemente “escoria” que hay que retirar de la vista de los poderosos y de las clases “medias europeas”.
CGT denuncia estas políticas de violación de los más elementales derechos humanos, por parte de la U€ y considera que ninguna persona es ilegal y el derecho al asilo, refugio y a residir en cualquier parte del mundo, son Derechos Universales, los cuales esta U€ viene obligada a cumplir y terminar con sus políticas de vergüenza y exterminio de las personas migrantes.
Secretariado Permanente de Comité Confederal
Fuente: Secretariado Permanente del Comité Confederal de la CGT